En México las estructuras del crimen organizado continúan expandiendo su alcance, afectando en particular a los sectores más jóvenes de la población, a quienes los cárteles de las drogas han reclutado para diversas actividades criminales, incluidas la vigilancia, el trasiego de estupefacientes y, en casos extremos, torturas y asesinatos. Sin embargo, este sector de la población también se ha visto trastocado por los tentáculos del crimen organizado incluso sin que éstos estén dentro de sus filas, siendo víctimas indirectas.
El crimen organizado no solo implica la participación activa de los adolescentes y adultos jóvenes en la delincuencia, sino que también repercute en su entorno social y familiar, a menudo sin necesidad de una asociación directa. Las comunidades donde operan estas estructuras criminales experimentan un clima de inseguridad y violencia, lo que afecta el desarrollo integral de la juventud y perpetúa un ciclo vicioso de involucramiento forzado o indirecto en el crimen organizado.
Pese a algunas iniciativas de seguridad, la inacción y colusión de las autoridades de los tres niveles de poder han perpetuado la influencia de los cárteles sobre los jóvenes.
Sólo en los últimos cuatro meses se ha registrado una oleada de violencia contra grupos de jóvenes que han causado gran indignación a nivel nacional y que han estado en el ojo a nivel internacional.
Lagos de Moreno
La desaparición de Uriel Galván, Dante Cedillo, Jaime Adolfo Martínez, Diego Alberto Lara y Roberto Olmeda se reportó en la noche del 11 de agosto. Según la versión, los cinco amigos se reunieron con otra persona en un lugar conocido como ‘El Mirador’, en el municipio de Lagos de Moreno, Jalisco.
Este lugar era muy frecuentado por los jóvenes, sin embargo, ese día ninguno de ellos regresó a casa.
Las investigaciones de la desaparición de los jóvenes llevó más tarde al hallazgo de osamentas dentro de una ladrillera en la comunidad de La Troje. Aunque hasta el momento las autoridades no han confirmado que los restos hallados corresponden a los cinco hombres reportados como desaparecidos, lo cierto es que ese mismo lugar fue el escenario de una imagen y video que se filtraron.
En la imagen se ve a los jóvenes hincados, amordazados y con golpes visibles. En tanto, el video mostraba a los jóvenes sobre el piso, aparentemente sin vida, mientras uno más sostenía una piedra en la mano y, obligado, golpeaba a uno de sus amigos.
Aunque se han detenido a algunas personas presuntamente involucradas en la desaparición, hasta el momento ninguno ha obtenido una sentencia condenatoria. Además, hasta el momento se desconoce el paradero de los cinco jóvenes.
Jóvenes secuestrados en Villanueva, Zacatecas
Fue alrededor de las cinco de la mañana del pasado 24 de septiembre cuando siete jóvenes de entre 14 y 18 años de edad fueron levantados por un grupo de hombres armados cuando se encontraban dentro de una casa en el rancho El Potrerito, en la comunidad de Malpaso, en el municipio zacatecano de Villanueva.
Los jóvenes fueron identificados como Jorge Alberto René Ocon Acevedo (14 años); Óscar Ernesto Rojas Alvarado y Sergio Yobani Acevedo, ambos de 15 años; Diego Rodríguez Vidales y Diego Rodríguez Vidales, de 17 años; y Gumaro Santacruz Carrillo y Gumaro Santacruz Carrillo, de 18 años.
Los jóvenes se encontraban conviviendo alrededor de una fogata con otro grupo de amigas, a las que no les hicieron nada, así como tampoco a familiares que se encontraban dormidos.
Tres días después de la desaparición, el secretario general del Gobierno de Zacatecas, Rodrigo Reyes Mugüerza, confirmó el hallazgo de seis cuerpos a 70 kilómetros del rancho donde se llevaron, siendo el único sobreviviente Sergio Yobani Acevedo Rodríguez, quien fue ingresado de emergencia a un hospital.
Jóvenes asesinados en Celaya
La tarde del domingo 3 de diciembre los cuerpos de José Eduardo Freire Ortega, Bryan Jesús Amoles Gasca, los hermanos Jesús Virgilio y Fabián Orozco Mateos, y su primo Pedro Francisco Mateos Puente fueron hallados en un camino de terracería que va a la comunidad de Santiago de la Cruz, en el municipio guanajuatense de Celaya. Al día siguiente, Giovanni Juárez Figueroa, la sexta víctima, fue encontrado sobre el mismo camino, metros más adelante la mañana del lunes.
Las víctimas asistían a la Universidad Latina de México (ULM), en donde cursaban diversas especialidades: Jesús Virgilio y Fabián eran estudiantes de Cirugía y Fase I; su primo Pedro Francisco cursaba Pediatría; en tanto, José Eduardo se encontraba estudiando Pediatría y Brayan se especializaba en Cirugía. Dos de ellos se iban a graduar de la ULM en el 2024.
Giovanni por su parte tenía 18 años y era amigo de los hermanos Jesús Virgilio y Fabián Orozco Mateos; él era alumno del Instituto Vicente Guerrero (INSVIG).
De acuerdo con el fiscal Carlos Zamarripa, los cinco estudiantes de la ULM y él se encontraban en el balneario Arreguín de Abajo cuando fueron levantados por el grupo criminal.
Zamarripa detalló que los indicios arrojan que las víctimas se encontraban en Querétaro para asistir a una fiesta y luego viajaron al balneario, ubicado en los límites del municipio queretano de Celaya, en donde presuntamente sujetos armados plagiaron de su libertad a los jóvenes.
Precisó que todos fueron llevados a bordo de diversos vehículos y más tarde fueron torturados y asesinados.
Masacre en Salvatierra
El más reciente hecho de terror ocurrió el domingo 17 de diciembre. Esta vez el escenario fue la exhacienda de San José del Carmen, en el municipio de Salvatierra, Guanajuato, en donde un grupo de jóvenes que se encontraban celebrando una posada fueron masacrados por un grupo armado.
De acuerdo con la hipótesis que sigue la Fiscalía General del Estado (FGE), todo indica que al menos cuatro sujetos desconocidos que no estaban invitados a la fiesta tuvieron algunos altercados con los jóvenes, por lo que fueron corridos del lugar y se les negó el acceso.
Sin embargo, momentos después, poco antes de que la fiesta llegara a su fin, los sujetos regresaron con armas de alto poder para “vengarse”, irrumpiendo en el recinto con la orden de matar a todos los presentes.
Cabe apuntar que el ataque armado dejó al menos 11 personas muertas, entre ellos Thalía Cornejo, Macarena Becerril, Galileo Almanza, David Hernández, Irving Ruiz, Antonio Sánchez, Marco López, Emiliano Vargas, Héctor Almaraz, Tadeo Cornejo y Alberto Ramírez.