En respuesta a la actual crisis hídrica que afecta a Naucalpan, se anunció la necesidad inminente de abordar la disminución en el suministro de agua provocada por recortes en el sistema Cutzamala, del cual el municipio depende en un 75%.
Desde el 15 de agosto de 2022, Naucalpan ha experimentado una pérdida diaria de 34 millones 560 mil litros de agua, afectando a más de 70 colonias.
Ante esta contingencia, se ha establecido la imperativa decisión de iniciar la perforación de nuevos pozos como fuente de agua subterránea. A pesar de contar con derechos vigentes para la explotación de estas fuentes, es necesario que la Comisión Nacional del Agua agilice la gestión para la perforación de los pozos.
Los proyectos destinados a la perforación de nuevos pozos están proyectados para dar inicio en el año 2024, buscando fortalecer la infraestructura de producción de agua subterránea y paliar la crisis hídrica que aqueja al municipio. Este enfoque a largo plazo se considera esencial dadas las circunstancias actuales de escasez de agua.
Estadística hídrica
El análisis efectuado por el organismo municipal de agua potable indica una disminución en el suministro del orden de 400 litros por segundo. Se ha solicitado a la Comisión Nacional del Agua datos específicos que permitan una elaboración más precisa de estrategias para abordar la crisis, pero dicha información aún no ha sido proporcionada
Como medida de mitigación, se propone la rehabilitación de pozos municipales estratégicos, incluyendo aquellos ubicados en Conejos, Santa Cruz del Monte, Caracol, Bosques de Moctezuma, así como las plantas de rebombeo el Calvario, Colón de Echegaray, Remedios, Cerros de Moctezuma y la Cascada.
El recorte en el suministro, implementado desde el 15 de agosto de 2022, ha impactado negativamente a más de 70 colonias en Naucalpan, especialmente en las zonas altas y vulnerables del municipio, debido a que el flujo y fuerza del agua no logra alcanzar los niveles de fuerza óptimos, sumado al hecho del desperdicio por diversas fugas en el flujo suministro del mismo.
En este contexto, la alcaldesa Angélica Moya Marín presentó la necesidad de obtener información detallada de la Comisión Nacional del Agua y la Comisión del Agua del Estado de México respecto a los horarios y variaciones en los caudales, y así encontrar un método eficaz para controlar el flujo del mismo para la población.
Esto permitiría al organismo local programar entregas equitativas, valvuleos o tandeos, asegurando así la distribución justa del recurso hídrico a los usuarios finales.