Arturo Guzmán Decena, el joven fundador de Los Zetas, fue uno de los sicarios más sanguinarios de México, al ser uno de los expertos en explosivos, inteligencia militar, contra espionaje y en anular a guerrillas, esto gracias a su preparación en las fuerzas especiales del Ejército Mexicano.
‘El Z-1′ al venir de una familia de escasos recursos se vio obligado en tener que dejar a medias sus estudios, por lo que solamente terminó de cursar la secundaria de forma tradicional, para después concluir la preparatoria dentro del Ejército Mexicano.
Por lo general los miembros de grupos delictivos de pasadas generaciones son personas que vienen de clase baja que no tuvieron oportunidades y decidieron ingresar a las filas del crimen organizado, pero el caso de Guzmán Decena es distinto debido a que primero trabajó para el Gobierno.
Cabe recordar que el Grupo Aeromóvil de Fuerzas Especiales fue creado por el Gobierno con el fin de hacer frente al alzamiento del EZLN en Chiapas, esto a mediados de los 90, fecha en la que el joven de apenas 18 años de edad ingresó a la Sedena.
Arturo era originario de Puebla, pero por cuestiones de trabajo tuvo que desplazarse al estado de Tamaulipas donde conoció a miembros del Cártel del Golfo y quedó sorprendido al ver sus lujos y cómo ganaban en un mes lo que él no alcanzaba en un año.
En 1998 decidió desertar del Ejército para fundar Los Zetas, el brazo armado de los comandados por Osiel Cárdenas Guillén, donde tuvo actividad por más de cuatro años tras caer en manos de las autoridades a la edad de 26 años.
Tras su salida del Ejército, estuvo trabajando reclutando a otros militares para formar el brazo armado, debido a que tuvieron como primera misión el acabar con ‘Los Chachos’, grupo de pistoleros originarios de Texas, quienes buscaba posicionarse en Ciudad Miguel Alemán, Nuevo Laredo, Matamoros y Reynosa, siendo parte del Cártel de Sinaloa.
‘El Z-1′ fue abatido por el Ejército
Al ser considerado como un “traidor”, elementos de la Sedena terminaron con su existencia 22 de noviembre de 2002, al propinarle un solo impacto de bala y no permitirle una reacción, debido a que su deceso se dio de manera instantánea.
El error de ‘El Z-1′ fue decirle a sus compañeros del cártel que bloquearan la calle y dirigieran el tráfico, lo que provocó que los vecinos se alertaran e hicieran un llamado a las autoridades que al verlo sin dudarlo le dispararon en una ocasión para después levantar le cuerpo.