Un científico de 35 años, de nombre Javier Robles Castillo, se encuentra desaparecido desde el pasado miércoles 15 de noviembre, luego de ser privado de su libertad por tres personas que lo abordaron en su casa, ubicada en la colonia Bellas Artes, en Tijuana, Baja California.
Desde ese día, sus familiares no han tenido información sobre el paradero del joven, por lo que el pasado lunes, en compañía de compañeros de trabajo y amigos, se manifestaron frente a las instalaciones de la Fiscalía General del Estado (FGE) de Tijuana.
Además, solicitaron a la ciudadanía su colaboración para localizar a Javier Robles. Dijeron que, como señas particulares, el hombre mide 1.80 metros de altura, es de tez morena, ojos cafés, cabello corto y oscuro con canas.
Las personas que se manifestaron portaban pancartas con el nombre del joven, así como fotos, y consignas con datos de contacto y señas particulares para dar con su ubicación. Todo esto, gritando al unísono “Javier, Javier, Javier”.
Alma Edith Castillo Torrija, madre de Javier Robles, y quien lideró la manifestación, gritó “devuélvanme a mi hijo”. También describió a su hijo como un joven dedicado a la ciencia y el desarrollo de productos orgánicos.
“Su único mundo es la ciencia, la ciencia, la ciencia. Es un chico que queremos de regreso en casa”, expresó entre lágrimas la madre del joven a Milenio, sosteniendo una pancarta con la fotografía de su hijo y la conmovedora leyenda “Hasta encontrarte hijo mío, Javier”.
Javier es un físico y químico por el Instituto Tecnológico de Tijuana y la Universidad Autónoma de Baja California, así como asesor de varias empresas.
¿Qué pasó con Javier Robles?
El pasado 15 de noviembre, familiares de Javier tuvieron contacto con él por última vez, a las 16:16 horas, cuando informó por teléfono que había regresado a Tijuana, luego de realizar pruebas de un proyecto en Mexicali.
En un video que obtuvo la Fiscalía General del Estado se puede ver el momento en el que Javier es abordado por tres hombres desconocidos, quienes lo suben a un auto, sin que hasta el momento se sepa nada sobre su paradero.
Manuel Robles, hermano del joven científico, declaró al medio Milenio que “mi hermano no se merece esto, nadie se lo merece”.
Por su parte, su hermano Cristian dijo al mismo medio que “realmente lo único que sabe es que su papi está de viaje, no hay otra razón, no hay palabras para poderle decir”, al referirse a la pequeña hija de Javier, quien cuenta apenas con 4 años de edad.
La FGE continúa con las investigaciones, sin embargo, hasta el momento, no se han recibido demandas de rescate económico ni información sobre su paradero.