Dónde ver la colección de Auguste Rodin en la CDMX

El trabajo de Auguste Rodin, uno de los maestros de la expresión a nivel mundial, considerado también uno de los primeros artistas en romper los esquemas en cuanto a la creación de esculturas, se encuentra en la Ciudad de México.

En la capital del país podemos encontrar decenas de museos en donde se resguardan las más importantes obras de grandes artistas mexicanos, pero también extranjeros, como en el caso de Rodin, el padre de la escultura moderna, incluso en la CDMX se encuentra la colección más grande de sus piezas, después de la que está en su natal Francia.

Es en el Museo Soumaya, en su sede de Plaza Carso, que el público puede conocer el trabajo Rodin de forma gratuita. En este recinto se conservan más de 300 obras del escultor.

Algunas de las piezas más populares a nivel mundial que se encuentran en el Museo Soumaya están El Pensador y La puerta del infierno, de esta última obra hay sólo ocho en todo el mundo.

Auguste Rodin: Escultura europea de los siglos XIX y XX es la colección permanente en la que se pueden observar las cientos de obras del artista; una parte se encuentra casi en la entrada, mientras que otra abarca toda una sala.

El Museo Soumaya -en sus tres sedes- abre todos lo días del año, tiene un horario de 10:30 horas a 18:30 horas y la entrada es libre.

La importancia de la obra y vida de Rodin radica en que a lo largo de su carrera artística buscó romper los esquemas establecidos en la escultura antes del Impresionismo, pues hasta ese momento, el siglo XIX, esta expresión artística había seguido la forma clásica que había perdurado por años.

Así como sucede con las pinturas impresionistas, la escultura de este movimiento tenía como característica lo inacabado y la fluidez, pues se basaba en captar el momento, sin darle detalle a las formas, como sucedía en el caso de los grandes maestros clásicos, Miguel Ángel o Gian Lorenzo Bernini.

Aunado a esto, el francés comenzó a cuestionarse algunas figuras desde lo cultural y lo social, por lo que sus obras también implican una carga filosófica.

Fue por ello que las esculturas que creó Rodin fueron un cambio total en el las artes plásticas y abrió camino a nuevas formas de retratar a partir de tallar, esculpir y forjar.