Así comenzó la guerra por Ocotlán que “El Mencho” y el CJNG lanzaron contra el gobierno

En Ocotlán, una ciudad de poco más de 106 mil habitantes ubicada a las orillas del Lago de Chapala, Nemesio Oseguera Cervantes, “El Mencho”, decidió instalar una de las primeras bases de sicarios del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG); el lugar no fue elegido por casualidad, pues su cercanía con Michoacán le permitía la expansión que años más tarde -ocho para ser exactos- lo llevarían a tener presencia en 27 de las 32 entidades del territorio nacional.

Era el año 2015 cuando pobladores de Ocotlán comenzaron a señalar el reclutamiento de jóvenes, los patrullajes con hombres fuertemente armados y los sueldos de hasta cinco mil pesos semanales con los que el CJNG prometía a sus integrantes una vida de lujos y poder.

Fue también en 2015 -el 19 de marzo para ser exactos- que integrantes del CJNG emboscaron a elementos de la División de Gendarmería de la entonces Policía Federal; estos patrullaban a bordo de siete unidades la colonia La Mascota en Ocotlán y que terminó con un saldo de cinco oficiales muertos.

Para la tarde del 6 de abril agentes de la Fuerza Única de Jalisco descubrieron un camión de redilas incendiándose sobre la carretera Mascota-Puerto Vallarta; al bajarse de la unidad fueron emboscados por sicarios del CJNG quienes asesinaron a otros 15 oficiales.

La guerra que el CJNG comandado por “El Mencho” lanzó contra el gobierno federal llegó a su punto más alto en mayo del mismo año -el jueves 1- cuando un lanza cohetes RPG-7 impactó un helicóptero de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) obligándolo a realizar un aterrizaje de emergencia.

La caída del helicóptero ocurrió cerca de la frontera con Colima, entre los municipios de Casimiro Castillo y Villa Purificación; ese día se registraron al menos 39 narcobloqueos en 25 municipios de Jalisco y al menos 15 muertos, entre ellos seis soldados y un policía federal.

Las autoridades de Jalisco indicaron que durante un patrullaje de reconocimiento notaron un convoy con “camionetas sospechosas” -las que suele utilizar el crimen organizado-; al notar esto el helicóptero Cougar con matrícula 1009 y 18 elementos a bordo se acercó un poco, lo que provocó la respuesta “inesperada” del CJNG.

Aunque se creó la hipótesis de que en el convoy iba “El Mencho” y por eso sus hombres actuaron con esa brutalidad, esta información no se confirmó.

La respuesta del gobierno federal vino sólo tres semanas más tarde. El 22 de mayo 42 presuntos integrantes del CJNG fueron asesinados -13 de ellos de manera extrajudicial- en una balacera que duró al menos dos horas.

Cerca de 100 elementos de la Policía Federal y un helicóptero artillado llegaron poco después de las 6 de la mañana al rancho El Sol en Tanhuato, Michoacán, después de perseguir a una camioneta blanca desde la cual hombres armados les dispararon y que en la huida se impactaron contra un árbol a las afueras del citado rancho.

Cuando la balacera concluyó se contabilizaron más de 6 mil casquillos percutidos; los cuerpos de los presuntos sicarios del CJNG quedaron tendidos en distintas posiciones -algunos dormían al iniciar el enfrentamiento-, unos iban descalzos y casi desnudos, ocho murieron al intentar huir y algunos presentaban el “tiro de gracia”.

Tras las inconsistencias del “operativo” que terminó en una masacre de 42 a 1 -como lo celebró el entonces presidente Enrique Peña Nieto al “reconocer” la superioridad del armamento y capacidad del gobierno federal- se creó la hipótesis de una “revancha” por las emboscadas sufridas semanas atrás; incluso la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CDNH) señaló a la Policía Federal de hacer uso excesivo de la fuerza, manipular evidencia y tratar de manera indigna a los cuerpos de los presuntos criminales.

Tres años más tarde, cuando el gobierno intentó mandar más elementos de seguridad a Ocotlán los pobladores y el crimen organizado armaron barricadas para evitar su ingreso al municipio; el descontento venía de la masacre de Tanhuato, pues 30 de los 42 presuntos criminales abatidos eran originarios de esta región.

Ya en 2023 circuló un video donde tres hombres -presuntos ladrones- caminan con un cartel en las manos mientras otros personajes vestidos de militares pero con las insignias del CJNG los “exhiben” por cometer crímenes en Ocotlán; en las imágenes se aprecian módulos de la policía pero nadie responde pues es sabido por los habitantes que quien controla el municipio es “El Mencho” y el cártel de las cuatro letras.