Una investigación realizada por Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI) dio a conocer las “condiciones de alerta” en las que se encuentras varias líneas del Metro de la Ciudad de México (CDMX), las cuales generan un panorama de inseguridad para las y los usuarios.
Fracturas, fisuras, humedad y agrietamientos son algunas de las irregularidades que se detectaron en la Línea 4, identificada por el color cian. Esta red abarca 10 estaciones que van desde Martín Carrera a Santa Anita y se extiende a lo largo de más de 10 kilómetros.
Las anomalías en esta línea tienen que ver, en parte, con la antigüedad de sus inmediaciones, pues por más de cuatro décadas ha operado. Fue en agosto de 1981 cuando se inauguraron siete estaciones ubicadas en las alcaldías Gustavo A. Madero y Venustiano Carranza.
MCCI consultó una decena de informes de revisión obtenidos mediante una solicitud de transparencia, en los que se reflejan las condiciones físicas de los andenes y el viaducto elevado de la Línea 4.
En los documentos, fechados entre agosto y diciembre de 2022, se indica que hay una “separación excesiva” entre las trabes, además de que en sus instalaciones se ha reportado humedad y corrosión en las estructuras. De las 10 estaciones que la conforman, al menos ocho presentan altos índices de desnivel, las cuales son:
- Morelos (conexión con la Línea B). Desnivel de 38.5 centímetros
- Talismán. Desnivel de 28.8 centímetros
- Bondojito. Desnivel de 26.4 centímetros
- Consulado (conexión con la Línea 5). Desnivel de 24 centímetros
- Canal del Norte. Desnivel de 23.2 centímetros
- Fray Servando. Desnivel de 7.4 centímetros
- Jamaica. Desnivel de 12.9 centímetros
- Santa Anita. Desnivel de 15.4 centímetros
En la revisión que hicieron expertos del Consorcio IUYET —contratado por el Metro de la CDMX— se advertía que las estructuras de protección del viaducto elevado estaban dañadas y existían condiciones de riesgo, lo que aumentaba la posibilidad de que cayeran tramos sobre la vía pública.
“Sobre el tramo elevado de la Línea 4, específicamente entre las estaciones Talismán y Candelaria, ha estado ocurriendo un fenómeno donde pareciera que las zapatas de las columnas están emergiendo”, se lee en uno de los documentos consultados por el periodista Mauricio Rubí.
Se explicó que lo anterior se debe a la “subsidencia” que presenta el Valle de México, ya que las velocidades de hundimiento en esta región varían entre los 3 y 25 centímetros.
En cuanto a los andenes de la Línea 4, se indicó que presentan grietas, deformaciones excesivas, humedad y fisuras en concreto, sin especificar el grado de riesgo que ello implica para los usuarios. Esto se suma a las fallas en el funcionamiento de las escaleras eléctricas que estaban descompuestas cuando se realizó el peritaje.
MCCI indicó que en la Línea 9 del Metro (que lleva de Pantitlán a Tacubaya) también se han detectado deficiencias, como el mal manejo de las iluminarias en el tramo elevado. Sin embargo, no se detallaron las irregularidades en este tramo, ya que se presentará en otra investigación que aún no se ha publicado.
Como antecedente a estas fallas se encuentra el incidente de la Línea 12 ocurrido en mayo de 2021, cuando colapsó el tramo entre Tezonco y Olivos, lo que dejó a más de veinte personas sin vida.