Un magistrado redujo la sentencia de 50 años de prisión dictada a Diego Urik Mañón Melgoza, responsable del feminicidio de la joven Jessica González Villaseñor, ocurrido en septiembre de 2020 en el estado de Michoacán.
El magistrado Gilberto Alejandro Bribiesca Vázquez, del Supremo Tribunal de Justicia del Estado de Michoacán (STJEM), argumentó la reducción de ocho años en la condena del feminicida de la profesora de preescolar al señalar que no está adecuadamente justificada en el expediente.
Además, añadió que este cambio “le dará oportunidad de reeducarse y reintegrarse a la sociedad, dado que es joven y cometió el delito cuando tenía 18 años”.
La pena de medio siglo fue impuesta el pasado 15 de febrero por el juez Ariel Montoya Romero, y ésta fue calificada de “sentencia ejemplar” por parte de la Fiscalía General del Estado, no obstante, con la nueva determinación Diego Urik pasará 42 años y seis meses en la cárcel, además de pagar un millón 246 mil pesos como reparación de daño.
El caso de Jessica González Villaseñor conmocionó a la sociedad mexicana en su momento. La joven de 22 años de edad fue vista con vida por última vez el 21 de septiembre de 2020; su desaparición generó grandes movilizaciones de colectivos feministas hasta que su cuerpo fue hallado cinco días más tarde con huellas de violencia en una zona residencial en Morelia.
Diego Urik, quien había sido novio de la víctima, fue a comer tacos con sus amigos el día que privó de la vida a la profesora. Ahí les pidió ayuda para deshacerse del cuerpo de Jessica, el cual llevaba en la cajuela de su coche, pero ante la negativa de éstos decidió dejar el cadáver en el fraccionamiento Montaña Monarca. El 25 de septiembre, el cuerpo de Jessica fue localizado por la Fiscalía con signos de violencia física y sexual.
Ya que el hallazgo se hizo cerca del domicilio de Diego, se le consideró como el principal sospechoso y tres días después se ofreció una recompensa de un millón de pesos por datos que ayudaran a dar con su paradero. El joven finalmente fue detenido en un hotel de Jalisco el 30 de septiembre de 2020.
Durante el juicio, la Fiscalía de Michoacán presentó más de 120 pruebas que ayudaron a determinar que Diego Urik era el responsable del feminicidio de la joven, de quien abusó sexualmente y luego le propinó golpes en el rostro, tórax y muslos hasta causarle la muerte.
En ese proceso, la familia González Villaseñor también fue presa de amenazas por parte de la familia de Diego a través de mensajes de texto e incluso en las mismas audiencias.
FGE muestra inconformidad
El titular de la FGE de Michoacán, Adrián López Solís, dijo ser respetuoso de la independencia judicial, no obstante, dijo que no comparte la determinación de la reducción de la condena de Diego Urik.
“Una sentencia máxima es ejemplar y como pena ejemplar también inhibe la comisión de este tipo de delitos que son repudiados por la sociedad, que igualmente deben ser sancionados por la justicia”, señaló.
López Solís también defendió el actuar de la Fiscalía en dicho caso y subrayó que hubo muchas pruebas para determinar la culpabilidad y con ello dar la sentencia máxima.
Familia de Jessica apelará decisión
Verónica Villaseñor, madre de Jessica, lamentó la modificación de la condena del asesino de su hijo y señaló que no logra entender qué fue lo que pasó tras sufrir un proceso penal que sufrió tres años.
“No hay argumentos para que le disminuyan la sentencia, estoy destrozada, me siento en total indefensión, no puede ser posible que después de tanto tiempo de haber recabado todas las pruebas y haber comprobado que ese tipo asesinó a mi hija de manera tan brutal, ahora le disminuyan la sentencia”, confesó la mujer al medio La Voz de Michoacán, a quien detalló que la noticia se la dieron el lunes.
La señora confirmó que la familia apelará la decisión y ya están en trámites con los abogados para interponer un amparo, misma que debe formalizarse como máximo en 10 días.