Las autoridades de Jalisco se encuentran en alerta luego de que se reportara que un policía de Tonalá fue privado de la libertad por parte de un grupo armado cuando el uniformado se encontraba en un local de servicio de lavandería en el municipio de San Pedro Tlaquepaque.
De acuerdo con la información, Fernando Ramos Enríquez estaba el pasado 26 de octubre en el local de la colonia Parques de la Victoria, muy cerca de su domicilio, cuando aproximadamente a las 19:15 horas el comando arribó al establecimiento.
Los sujetos armados sacaron al oficial de su vehículo y lo subieron a una camioneta blanca Honda CVR, que a su vez iba escoltada por dos motocicletas.
La pareja sentimental del policía, que se encontraba al interior del local cuando ocurrieron los hechos, llamó al 911 y luego presentó la denuncia ante el Ministerio Público de la Fiscalía Especializada en Personas Desaparecidas.
Posteriormente, la Comisaría de Seguridad Pública de Tonalá confirmó que su elemento sí había sido levantado.
El oficial Fernando Ramos Enríquez había llegado hace apenas un mes a la corporación, que a su vez lo asignó al Cenpo 8. Antes había trabajado en la Comisaría Municipal de Acatic, en donde renunció voluntariamente y, según sus resultados, el joven de 29 años aprobó todos los exámenes de confianza.
Por su parte, la Fiscalía General del Estado de Jalisco dio a conocer que ya realiza las labores de búsqueda del policía, aunque hasta el momento no se tiene más información sobre el comando que se lo llevó.
De acuerdo con la ficha de búsqueda, el oficial mide 1.60 metros, pesa 83 kilos, es de tez blanca, con cabello castaño oscuro, grueso y lacio; tiene ojos cafés de tamaño mediano; tiene un tatuaje de un cráneo en el hombro izquierdo con la leyenda “1932″, en el tobillo tiene una cereza y en el empeine derecho un diamante; perforaciones en ambos lóbulos de la oreja.
El día de su desaparición vestía una sudadera gris, short verde, sandalias rosas y una cadena de plata.
Jalisco y su ola de desaparecidos
La desaparición de personas en México no cesa y Jalisco continúa siendo un preocupante escenario de este delito.
Datos oficiales del Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No Localizadas (Rnpdno) señalan que del 1 enero de 1962 al 3 de noviembre de 2023, el número de reportes de personas desaparecidas o no localizadas en el estado de Jalisco era de 14 mil 907 personas, lo que representa el 13.52% del total registrado a nivel nacional.
Con ello, Jalisco se ha convertido en el estado en donde más se reportan desapariciones, seguido de Tamaulipas (13,112); Estado de México (11,914); Veracruz (7,068); y Nuevo León (6,531).
De esta cifra total, los municipios que más concentran casos de personas desaparecidas son Guadalajara, Zapopan, Tlajomulco de Zúñiga, Tlaquepaque y Puerto Vallarta.