En lo más profundo de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), un lugar de conocimiento y sabiduría, yace un oscuro y misterioso lado poco conocido por el público. Ciudad Universitaria (CU) es hogar de algunas de las leyendas más escalofriantes de México, donde lo paranormal y lo inexplicable se entrelazan con la academia y la ciencia. Desde hallazgos ovnis hasta eventos de exorcismos en sus aulas, CU alberga historias que desafían la lógica y despiertan la curiosidad.
En esta exploración de las historias más aterradoras de Ciudad Universitaria, nos aventuraremos en el misterioso pasillo de las psicofonías, descubriremos la leyenda del vampiro que aterrorizó a los estudiantes y desentrañaremos el enigma de los remanentes de una civilización extraterrestre. Un viaje al lado oscuro de la UNAM, donde lo inusual se encuentra con lo académico y donde lo paranormal encuentra un hogar en la educación superior.
La Planchada
Cuenta la historia de una enfermera que, según la narrativa popular, trabajaba en el Hospital General de la UNAM en la década de 1960. En circunstancias misteriosas, se cree que murió en uno de los quirófanos del hospital.
Desde entonces, su espíritu supuestamente ha estado vagando por los pasillos de la Facultad de Medicina y otros edificios de CU. Se la describe como una figura vestida con un uniforme blanco impecable y una cofia en la cabeza. A menudo se le llama “La Planchada” debido a la similitud de su atuendo con el de una enfermera de esa época.
Los estudiantes y el personal de la UNAM han compartido numerosos relatos sobre encuentros con este espíritu. Afirman haberla visto en las noches, a menudo cerca de la Facultad de Medicina. Algunos describen haber sentido una presencia escalofriante, mientras que otros han tenido experiencias más vívidas, como verla caminar por los pasillos o escuchar susurros en los cuartos desiertos.
Aunque la existencia de “La Planchada” es una leyenda y carece de evidencia sólida, ha persistido como una parte icónica de la historia de CU.
El Pasillo de las Psicofonías
El Pasillo de las Psicofonías es una de las leyendas más inquietantes de CU en la Ciudad de México. Se trata de un largo pasillo ubicado en la Facultad de Psicología de la UNAM. La leyenda cuenta que este pasillo es el escenario de fenómenos paranormales y psicofonías, que son supuestas grabaciones de voces de ultratumba.
Se dice que los estudiantes y el personal de la Facultad de Psicología han sido testigos de sucesos extraños en este pasillo. Se han reportado puertas que se abren y cierran solas, luces que parpadean sin explicación y, lo más perturbador, grabaciones de voces misteriosas que aparecen en las cintas de audio utilizadas en investigaciones paranormales.
La leyenda sugiere que este pasillo es un lugar donde la barrera entre el mundo de los vivos y el de los muertos es especialmente delgada. Se cree que las voces capturadas en las grabaciones son mensajes de espíritus inquietos que intentan comunicarse desde el más allá.
Los estudiantes de psicología a menudo se aventuran a investigar estos fenómenos, utilizando dispositivos de grabación y equipos de detección paranormal. Aunque las explicaciones racionales para estos eventos podrían incluir fallas técnicas o ruido ambiental, el Pasillo de las Psicofonías sigue siendo un lugar de fascinación y misterio en CU.
Caso Xitle: evidencia extraterrestre en CU
En la década de 1950, un asombroso suceso sacudió a Ciudad Universitaria. Durante las excavaciones en la construcción de la cantera en el campus, se desenterraron una serie de artefactos de origen extraterrestre que dejaron a todos estupefactos.
La noticia de estos hallazgos llegó a oídos del gobierno y las fuerzas militares, que rápidamente se presentaron en el lugar para retirar los misteriosos objetos con la máxima discreción. Sin embargo, la historia dio un giro siniestro cuando un teniente, cuyo nombre permanece en el anonimato por razones de seguridad nacional, perdió la vida al tocar uno de estos artefactos. De inmediato, el cuerpo del teniente y los demás objetos fueron trasladados a Campo Marte, una base militar en la Ciudad de México, y se emitió una prohibición tajante para continuar las excavaciones en la cantera.
A raíz de este incidente, la zona de la cantera y sus alrededores se convirtieron en áreas de acceso restringido y se incorporaron a la reserva ecológica del Pedregal, bajo la supervisión de la UNAM. Esto podría explicar la intensa actividad energética que se dice que persiste en esta área. Sin embargo, a día de hoy, los residentes cercanos aseguran que aún se pueden avistar maquinaria pesada operada por agentes de seguridad que rondan la zona de las excavaciones.
Las imágenes de este suceso extraordinario fueron capturadas por el periodista Rubén Salazar, reconocido por sus reportajes y columnas en el Los Angeles Times. Salazar logró obtener documentos confidenciales que relataban la fatídica muerte del teniente y la intervención del gobierno de los Estados Unidos en el estudio de los objetos recuperados. Sin embargo, estos documentos ahora se consideran perdidos en la historia.
El vampiro de CU
La leyenda del “Vampiro de Ciudad Universitaria” es una de las más famosas historias de terror asociadas a la UNAM en CU. Se dice que en la década de 1970, un ser misterioso y aterrador acechaba los pasillos y áreas boscosas de la universidad.
Según la leyenda, el vampiro era un estudiante de la UNAM que, debido a razones desconocidas, se convirtió en un no-muerto sediento de sangre. Se dice que se ocultaba en los oscuros bosques de CU durante el día y salía por la noche en busca de víctimas desprevenidas. Era descrito como un ser pálido y demacrado, con colmillos afilados y ojos que brillaban en la oscuridad.
Los estudiantes y residentes cercanos a Ciudad Universitaria compartían historias de encuentros aterradores con el vampiro. Se decía que atacaba a personas solitarias que se aventuraban en las áreas boscosas durante la noche. A medida que crecían los relatos de avistamientos y ataques, la paranoia se apoderó de la comunidad universitaria.
Aunque la leyenda del “Vampiro de CU” nunca fue respaldada por evidencia concreta y se considera una historia de terror urbano, ha perdurado a lo largo de los años y se ha convertido en parte de la rica tradición de leyendas de la UNAM. La historia del vampiro sirve como un recordatorio de que, incluso en entornos académicos y urbanos, el miedo y la superstición pueden tomar el control de la imaginación colectiva.
Exorcismo en La Facultad de Psicología
Cuatro años atrás, en la Facultad de Psicología, ocurrió un evento extraordinario que sigue intrigando a quienes lo presenciaron. Según un relato de Twitter compartido por ‘El Mario’, la experiencia tuvo lugar al final de una clase, cuando el grupo se encontraba atento a las exposiciones.
La situación se desató cuando una estudiante se levantó de su asiento y se volvió hacia su compañera, dejando a la profesora a sus espaldas. Lo que vino a continuación asombró a todos los presentes. La estudiante se inclinó hacia atrás y comenzó a respirar de manera intensa. La profesora, preocupada, se acercó a ella, pero pronto, la tensión en la habitación aumentó.
De repente, un grito rasgó el aire y la estudiante conocida como ‘X’ se retorció violentamente en su silla, los cuadernos cayeron al suelo, y el grupo retrocedió, apartando las bancas. X se deslizó al suelo, donde convulsionó durante unos momentos. Luego, emitió una risa extraña y pronunció una inquietante frase: “Maria, El señor no te salvará”.
La conmoción se apoderó del grupo, y abandonaron rápidamente el salón, llenos de incertidumbre. Al principio, pensaron que X había sufrido un ataque de epilepsia, pero la profesora les sorprendió al decir: “Necesito 6 personas que me ayuden con su compañera, pero que tengan su fe firme, que crean en algo superior”.
Se reunieron seis personas y formaron un círculo protector alrededor de X. Cuando esta recuperó la conciencia, comenzó a hablar de manera inusual. Los estudiantes oraron, pero la situación empeoró, y llevó tiempo antes de que X regresara a la normalidad. Finalmente, las autoridades universitarias llegaron.
El testimonio de un estudiante dejó más preguntas que respuestas, y su profesora explicó: “Las personas tienen una capa de energía en su cuerpo, y a veces esta capa se rompe, permitiendo que la energía externa nos haga daño. A ella le ocurrió eso, y yo había estado trabajando con ella, pero esto sucedió”.