Ésta es la leyenda de la Casa “La Moira” en San Miguel Chapultepec

Las casas embrujadas, tanto reales como ficticias, se convierten en un atractivo imperdible cada año cuando octubre despierta con su atmósfera de terror y emociones fuertes.

Pero detrás de estas historias de fantasmas y sucesos paranormales, hay una que se destaca por su trágica historia y la inquietante sensación que rodea su existencia: “La Moira”, una antigua casa embrujada ubicada en la colonia de San Miguel Chapultepec.

La Casa La Moira, ubicada en José Vasconcelos número 125, San Miguel Chapultepec, ha sido durante mucho tiempo conocida por ser el escenario de innumerables historias encantadas en México. Sin embargo, en los últimos años, su notoriedad disminuyó, aunque su macabro atractivo sigue siendo innegable.

Esta mansión, que anteriormente se destacaba por su aspecto limpio y siniestro, experimentó un cambio significativo en su apariencia: ahora está completamente pintada de negro, un detalle que se ajusta a las inquietantes leyendas locales que la rodean.

Una de las historias más conocidas y espeluznantes asociadas con La Moira es la de un niño llamado Marco, que a la tierna edad de ocho años, ingresó a esta casa abandonada y vivió una experiencia que lo traumatizaría de por vida.

Según relatos, escuchó voces extrañas e inexplicables provenientes de la casa, lo que lo impulsó a explorar más a fondo. Con valentía, se aventuró a subir las escaleras y entró en uno de los dormitorios, donde presenció una aterradora aparición: un hombre colgado del techo.

Este traumático suceso se quedó grabado en su mente, convirtiéndose en una obsesión que lo llevó a regresar a la casa diez años después, sin volver a salir jamás. Marco fue encontrado ahorcado en el mismo cuarto donde presenció la macabra escena.

Las circunstancias detrás de por qué Marco regresó a la propiedad son un misterio que ha generado especulaciones. Algunos creen que fue la curiosidad la que lo impulsó a volver, mientras que otros sugieren que pudo haber sido poseído por una entidad oscura que lo atrajo hacia su trágico destino. Sea cual sea la verdad detrás de esta historia, la casa sigue siendo ampliamente considerada como un lugar verdaderamente encantado.

Antonio Zamudio, fundador de la Agencia Mexicana de Investigación Paranormal, afirma que La Moira está habitada por tres espíritus, incluyendo el de Marco. Aunque algunas personas dudan de esta afirmación, la casa emana una pesada energía.

Para respaldar esta afirmación, el propietario de la casa promovió una intervención artística en la que 15 a 20 artistas plasmaron sus sentimientos en las paredes.

Los testimonios indican que la mayoría de ellos pintó sobre tristeza, desolación, sentimientos negativos e incluso imágenes suicidas, lo que sugiere que la casa está imbuida de un aura lúgubre.

A lo largo de los años, este inquietante edificio ha sido testigo de una amplia gama de fenómenos paranormales, que incluyen figuras de sombras en movimiento, sonidos inexplicables, voces incorpóreas, anomalías en la luz, actividad poltergeist e incluso casos de visitantes que afirman haber experimentado visiones. Se cree que La Moira alberga entidades demoníacas con la capacidad de poseer a los vivos.

En un momento de su historia, la propiedad fue utilizada para llevar a cabo sesiones espiritistas, durante las cuales los participantes informaron de múltiples posesiones demoníacas.

También se ofrecieron recorridos nocturnos en su interior, pero no duraron mucho tiempo debido a las peligrosas presencias demoníacas que, según los organizadores, hacían que caminar por la casa fuera riesgoso.

Hoy en día, ha dejado de ser una galería abierta al público y se ha convertido en una residencia privada, inaccesible para la mayoría. A pesar de esto, sigue siendo considerada uno de los lugares más encantados de México, y su ominosa presencia sigue siendo visible desde la calle, recordando a todos que el misterio y la intriga persisten en esta propiedad legendaria.