“Se dio el topón, sonaban los vergaz*s. El Batallón. Conoció el gobierno a la Tropa del Infierno”, se escucha al comienzo de la canción El Topon del Diablo, la cual es interpretada por el rapero mexicano El Makabelico y alude a la sanguinaria célula del Cártel del Noreste (CDN).
La Tropa del Infierno es un brazo armado de dicha organización criminal que mantiene su centro de operaciones en Nuevo Laredo, Tamaulipas, donde ha protagonizado intensos enfrentamientos armados con autoridades federales.
Entre el 24 y 25 de marzo de 2018, esta agrupación de sicarios emboscó en tres ocasiones a elementos de la Secretaría de Marina (Semar) en la ciudad fronteriza de Nuevo Laredo. El cruce de fuego dejó a cinco personas muertas (incluidas un marino y dos niñas), así como una docena de elementos navales heridos.
Lo anterior ha sido considerado como una de las embestidas más notables del CDN en contra de la Semar, aunque no ha sido la única, pues a partir de entonces ha cobrado mayor notoriedad debido a ola de violencia que ha generado en el estado de Tamaulipas.
En julio de 2020, El Makabelico (considerado como uno de los mayores exponentes del rap bélico o narcorap) lanzó una canción sobre este grupo armado. En la pieza se relata la pugna que la Semar mantiene con La Tropa del Infierno.
“Venían saliendo, no esperaban los putaz*s. Los metimos pal cuartel a puro pinche vergaz*, gacho, pues ya estaban cagando mucho el palo. Y los del noreste pues nunca nos dejamos (...) La máxima autoridad, la Marina del gobierno se toparon con La Tropa del Infierno”, se menciona en la primera parte del tema musical.
A lo largo de la composición (que dura alrededor de cuatro minutos) se habla de la Semar como una institución que supuestamente no le pudo hacer frente al brazo armado del CDN, como se ve reflejado en los siguientes fragmentos:
“Qué cosas, decían que la Marina es peligrosa y salieron volando como pinch*s mariposas”, “Ni los venados brincan como estos put*s brincaron”, “Ya presentía los vergaz*s la Semar”, “¿Dónde andaba la marina?, ¿no que son gente de guerra? Por un momento dicen que se los tragó la tierra”.
En contraste, los sicarios son retratados como unos jóvenes que no le temen a las balas e incluso están dispuestos a dar su vida por la organización. “Que en paz descansen los caídos del evento, que por defender la plaza se rifaron el pellejo. El viejo les dio con lo que pudo, no falló. Todas las tropas apoyaron la misión. Arriba el Cártel del Noreste, con copia al batallón”, se escucha a mitad del tema.
Aunque este narcorap también fue lanzado en plataformas digitales, en Spotify ya no se encuentra disponible, como ha ocurrido con otras canciones de El Makabelico que hablan sobre el Cártel del Noreste.
El verdadero nombre de este rapero es Ricardo Hernández, originario de Nuevo Laredo, Tamaulipas. Desde el año 2017 se unió al sello discográfico Del Records y ha compuesto una diversidad de temas sobre el crimen organizado.
La mayoría de sus barras idealizan a los miembros de la delincuencia organizada, pues la imagen que se da de los sicarios y narcotraficantes es de hombres sin una pizca de miedo que reafirman su postura en contra de las autoridades, como sucede con los narcocorridos, los cuales han sido sumamente criticados por considerar que hacen una “apología al delito o la violencia”.
Aunque Hernández ha reconocido que son los mismos sicarios los que le “encargan” este tipo de temas, asegura que El Makabelico es un personaje que está separado de su vida privada, pues incluso se caracteriza por tener una máscara de calavera o pasamontañas. No obstante, sí hay repercusiones.
Cabe recordar que algunos artistas y agrupaciones que se dedican a interpretar este tipo de géneros musicales han recibido amenazas de grupos contrarios, como sucedió este año con Peso Pluma y Fuerza Regida en Tijuana, Baja California.