Para los mexicanos, los concursos de disfraces suelen ser apasionados, divertidos e ingeniosos, pero no por ello están exentos de polémicas o injusticias. Este ha sido el caso de un joven de nombre Bryan Naval, que decidió participar en la dinámica organizada por el Gobierno de Chalco, pero no le fue permitido porque su elección “no es un atuendo mexicano”, pese a que estaba recreando a Mictlantecuhtli, dios mexica de la muerte.
Fue a través de sus redes sociales donde el mexiquense externó su versión de los hechos, causando gran indignación pues más allá de la competencia que tenía o la ejecución de su caracterización, se reprochó la supuesta ignorancia que tuvieron las autoridades y jurados por desconocer de qué personaje se trataba y la importancia que tiene en la cultura mexicana.
“Les quería enseñar mi atuendo de el señor del Mictlán. Traté de competir en mi alcaldía pero ni siquiera me permitieron intentarlo. Las alas se despliegan como las de un ave y el macuahuitl que tengo en las manos es completamente real. Me dijeron que no era un atuendo mexicano yo les intenté explicar que era Mictlantecuhtli el dios de la muerte mexica pero no quisieron entender”, comentó.
¿Quién es Mictlantecuhtli y cuál es su importancia en la cultura prehispánica de México?
Mictlantecuhtli es una figura trascendental en la mitología y la cosmovisión de las civilizaciones prehispánicas de México. Este ser divino, cuyo nombre en náhuatl significa “Señor de los Muertos” o “Dios de los Inframundos,” desempeñaba un papel fundamental en la comprensión de la vida y la muerte en estas antiguas culturas.
Mictlantecuhtli era considerado como el gobernante del Mictlán, el lugar al que viajaban las almas de los fallecidos en su travesía hacia el más allá. Este inframundo era un reino oscuro y desafiante, lleno de obstáculos y pruebas que las almas debían superar para alcanzar su descanso eterno. La deidad Mictlantecuhtli era la encargada de juzgar a las almas y decidir su destino en el más allá.
La importancia de Mictlantecuhtli radicaba en su papel como mediador entre la vida y la muerte, un puente entre el mundo terrenal y el espiritual. Su influencia se extendía a rituales y festividades, en especial en el Día de los Muertos, que aún se celebra en México y en otras partes del mundo. En estas festividades, se rendía homenaje a los antepasados y se recordaba a Mictlantecuhtli como la deidad que presidía el viaje de las almas.
La figura de Mictlantecuhtli también dejó su huella en el arte prehispánico, con representaciones de cráneos y esqueletos que simbolizaban la transición de la vida a la muerte. Estas imágenes se encuentran en templos y monumentos en sitios arqueológicos como Teotihuacán y el Templo Mayor de la Ciudad de México.
Mictlantecuhtli es un recordatorio de la profunda conexión que las culturas prehispánicas tenían con la muerte y el más allá. Su importancia en la cultura de México perdura hasta hoy, influenciando las tradiciones y la espiritualidad del país. La deidad Mictlantecuhtli es un vínculo tangible con el pasado ancestral de México y una muestra de la riqueza de su herencia cultural.