Un clásico de la televisión mexicana ha regresado casi desde ultratumba para poner al filo del sobresalto a una nueva generación de espectadores, se trata de La Hora Marcada, la emblemática antología de suspenso y horror que Televisa transmitió de 1988 a 1990 y que hoy está de vuelta con una temporada de nueve perturbadores episodios.
Infobae México entró en contacto con algunos miembros de la producción de la serie antológica que llegó a la plataforma Vix este viernes 27 de octubre, para conocer más sobre el proceso de filmación y “el reto de espantar” a un público sobreestimulado 35 años después.
“Yo hice el casting de manera virtual, era una escena de las más azotadas, el personaje gritando y tú estás tranquilamente en tu casa y te tienes que meter en la ficción del terror desde tu casa, por Zoom, es todo un reto”, contó Boris Schoemann, protagonista del episodio La Mano, que narra la desventura de un hombre llamado ‘Maupassant’ que llega al hospital tras cortarse su propia mano, convencido de que su extremidad quiere asesinarlo.
“Ya había leído hace muchísimos años el cuento de Maupassant, y ahora está completamente reescrito y es una versión muy distinta. Aparte de La Hora Marcada, icónica, también Guy de Mapaussant y sus cuentos del Siglo XIX son icónicos, la mezcla de estos dos lenguajes me prendió mucho para participar. Aparte de lo tétrico, del suspenso, hay toda una carga humorística en la manera en cómo está escrito el capítulo, filmado, tanto Mercedes (Hernández) como un servidor gozamos muchísimo”, contó el dramaturgo sobre este capítulo dirigido por Michelle Garza (Huesera, 2022) que hace un guiño libre al cuento La Main del escritor y poeta francés publicado en 1885.
“La mujer de negro”, ese enigmático personaje que presagiaba la tragedia como un signo de muerte, presente en todos los capítulos originales de La Hora Marcada, es un sello distintivo de la serie que en este regreso es encarnado por la venezolana Hilda Abrahamz, quien aunque ya había tenido experiencias con el género del suspenso, éste es su primer proyecto de terror.
“Es un reto que asumir con estas nuevas visiones, de los directores jóvenes, es muy acertada. El público ha cambiado, el género ha cambiado, acertar a este nuevo género de terror, visto desde una perspectiva más fresca. ‘La mujer de negro’, según mi perspectiva y mi visión, es una presencia muy fuerte, con una energía arropadora. Yo soy una mujer de carácter fuerte, eso me ayuda, tengo una presencia fuerte, quizás mi contextura, mi tamaño, mi mirada, todo eso hizo posible que yo estuviera presente”, compartió la también modelo.
La filmación de La Mano tuvo lugar en el Hospital de Jesús, en el Centro Histórico de la Ciudad de México, cuya fundación por Hernán Cortés data de 1524. Ese espacio tan longevo también tiene algo de espectral y así lo cuenta Boris:
“Hacerlo en el primer hospital de Latinoamérica, en un lugar histórico, la verdad la vibra era muy fuerte por lo que ha sucedido en este lugar maravilloso, antiguo, con un patio bellísimo. Estábamos comiendo a mediodía y sí sentías las presencia de muchas personas que pasaron por su hora marcada por ahí, era ya meterse en contexto desde que entrábamos al set”, así lo dijo el actor que también participó en la cinta mexicana de horror Belzebuth (2017).
La nueva entrega de la serie que hace más de 30 años fue una incubadora de talentos como Guillermo del Toro, Alfonso Cuarón y Emmanuel El Chivo Lubezki también presenta el capítulo El primer regalo, que entrelaza los terrores de un espacio físico asfixiante y la expectativa ante la maternidad, al más puro estilo de El bebé de Rosemary.
“Un matrimonio joven, Lucas y Manu, esperan la llegada de su bebé en un viejo departamento heredado por la abuela. Conforme se acerca el nacimiento, Manu se dará cuenta de que en el edificio hay una presencia que espera a su bebé tanto o más que ella” es la premisa del episodio dirigido por Adrián García Bogliano, para quien darle “frescura” a lo tétrico es la clave para relatar una historia que perturbe al espectador.
“Es una gran serie que tiene un montón de fans que en su momento se aterrorizaron con ella, pero también es de hace 30 años y con todo respeto y cariño, la televisión ha cambiado muchísimo. ¿Cómo hacemos que sea fresco, que se sienta de esta época? No le quita nada a ese original, no es ninguna falta de respeto, es una reinterpretación de este tipo de historia, un tipo de relato fascinante”, contó el cineasta de Mórbido Films.
“Son historias de media hora, 40 minutos, autoconclusivas, que están construidas para que haya un tipo de shock hacia el final que te va a dejar sin aliento, y luego pasas al siguiente capítulo y entras a un universo completamente diferente y eso me parece maravilloso”
Un deteriorado edificio de la colonia Guerrero en CDMX fue el escenario escogido por Adrián e ideado como un personaje más, un espacio opresivo que abona desesperación a la oscura narrativa de El primer regalo.
“Quisimos crear una sensación de mucha realidad, que te sintieras ahí, muy táctil todo, con problemas que mucha gente se puede sentir muy identificada, no solamente el tema económico sino de vivir con vecinos en un edificio, los ruidos. Me parece de la riqueza que tiene esta ciudad que es impresionante, buscar esas locaciones, esos espacios, fue algo muy interesante e intenso. Nos metimos a locaciones que normalmente no son las que se usan en las serie mexicanas, normalmente siempre se van a filmar a zonas más acomodadas o ciertos lugar más cómodos para filmar, y este era bastante opresivo y con mucho ruido, bastante caótico”, compartió el guionista.
Por su parte, la protagonista Ruth Ramos se sintió conectada con el relato desde un inicio.
“Cuando leí el guion me ancló luego luego y quería platicar con Adrián y saber más, cómo íbamos a trabajar para llegar a esos estados de cierta ansiedad, paranoia, que habita ‘Manu’. Me dio muchísima curiosidad saber cómo iban a hacer esos efectos visuales”, contó sobre lo que vemos en pantalla: un bebé agusanado y paredes que oprimen hasta causar la asfixia.
“Esa casa va transformándose de pasar de un lugar muy esperanzador con este nuevo inquilino, nueva maternidad y paternidad, de ahí me pareció muy atractivo y retador personalmente, hace tiempo no habitaba estos estados, esa intensidad física o psicológica que requería. Fue muy rico atravesar eso como actor”
Al igual que Boris Schoemann sintió “presencias” durante la filmación de La Mano en el histórico Hospital de Jesús, Ruth también destacó la “densidad” del sitio, pues algunas escenas de El primer regalo fueron rodadas ahí.
“Estar en el hospital ahí, que fue una locación para otros capítulos, había unos pisos que estaban muy abandonados, de repente a mí me tocaba pasar por ahí para ir a vestuario y ahí se sentía una densidad, un frío, yo trataba mejor de no pensarlo mucho y sólo pasar”, contó. Por su parte Adrián vivió un momento de sugestión en el edificio de la Guerrero.
“Uno se sugestiona a veces con eso, a mí me pasó en uno de los scoutings, que entré a una de las habitaciones y empecé a escuchar un ruido de algo que se movía violentamente y parecía salido de nuestro capítulo, al final era una paloma que estaba atrapada, pero tuve cinco segundos de pánico total”, contó, “No hay manera de que no pases por esos lugares filmando terror también y está padre, está bien que pase”, añadió Ruth.