Luego de ser aprobada en la Cámara de Diputados, el Senado se dispone a aprobar esta misma semana la Ley de Ingresos 2024, la cual proyecta ingresos para el gobierno federal por 9 billones 066 mil 45.8 millones de pesos, de los cuales 1.9 billones serán obtenidos por la Secretaría de Hacienda a través de deuda pública.
En ese sentido, el subgobernador del Banco de México, Jonathan Heath, señaló que la meta de la inflación en un nivel del 3% podría ser difícil de alcanzar en 2024, como se tenía previsto, debido al ruido que podría meter el endeudamiento del gobierno federal.
El subgobernador de Banxico admitió estar preocupado porque la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador “va gastar más " en el 2024, y esto podría romper la tendencia a la baja de la inflación.
Aunque el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) reportó que en la primera quincena de octubre la inflación se desaceleró a 4.27%, Jonathan Heath dijo que todavía no se puede “cantar victoria” y que aún hay una “batalla larga” por delante.
Banxico mantiene en 11.25% la tasa de interés como medida para contener la inflación, sin embargo, el gobierno federal planea gastar el próximo año el mayor presupuesto de la historia de México, y según los analistas económicos cuando existe una alta circulación de dinero los precios se disparan al alza.
“Nosotros estamos tratando de frenar para que esa demanda agregada no siga creciendo tan arriba de la oferta, pero el gobierno al inyectar recursos está acelerando para que esa demanda aumente más de lo que está de lo que tenemos””, explicó Heath.
El economista explicó que si el país tiene una oferta con una cantidad de bienes, que no está creciendo según nuestra demanda, “en la variable de ajuste van a ser los precios, entonces eso hace que los precios aumenten”.
Esto quiere decir que si hay más compradores que bienes, entonces el precio de esos bienes se ajustará al alza.
La política monetaria en muy buena medida trata de frenar la demanda agregada para que esa brecha entre la oferta y la demanda disminuya, explicó Heath.
Ahora, las palabras del subgobernador no implican un escenario necesariamente negativo o adverso, sólo indica que la meta de una inflación al 3% podría no ser alcanzada en 2024. Cabe recordar que a finales de 2022 el ritmo de la escalada de precios se disparó a 8.5% y en lo que va del 2023 se ha desacelerado a 4.27%.
Por ello, el economista aseguró que la economía mexicana mantiene su fortaleza y el pronóstico del Producto Interno Bruto (PIB) podría elevarse de 3% a 3.5% al cierre del 2023.
Para el economista, el déficit fiscal que contempla el gobierno federal podría convertirse en un reto para Banxico y sus esfuerzos de reducir el nivel de la inflación hasta el 3%.
“Hay ahorita diferentes hechos que explican la demanda muy dinámica como el consumo de los hogares, la inversión privada y la inversión pública, que crecerá mucho en especialmente en el primer semestre del año entrante, y el déficit fiscal de 2024″, dijo durante una ponencia en el Tecnológico de Monterrey.
Por su parte, Gabriel Yorio, subsecretario de Hacienda, dijo ante senadores este 25 de octubre que la inflación en México podría estabilizarse en un nivel alrededor de 4.5% hacia el final de 2023.
El 24 de octubre, el Inegi reportó un incremento del 0.24 % en el Índice de Precios al Consumidor (IPC) respecto a los 15 días anteriores.
El Inegi recordó que en el mismo periodo de 2022, hace un año, la inflación quincenal fue de 0.44 % y la anual de 853 %.