Rosa Icela Rodríguez, secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), informó que de acuerdo con el Centro Nacional de Prevención de Desastres (CENAPRED), los pronósticos internacionales no tenían previsto que el huracán ‘Otis’ evolucionara rápidamente ni que fuera afectar a la costa de Guerrero.
En La Mañanera de hoy, en Palacio Nacional, la funcionaria detalló que en menos de 12 horas el huracán pasó de tormenta tropical a categoría 5, la cual es el nivel más alto en la escala Saffir-Simpson.
“De acuerdo con el CENAPRED, que es el Centro Nacional de Prevención de Desastres, son los especialistas en estos temas, en menos de 12 horas el huracán ‘Otis’ pasó de tormenta tropical a categoría 5, la máxima de la escala Saffir-Simpson, es decir, que de vientos de 64 km/h creció a 270 km/h”, dijo.
Precisó que el CENAPRED también indicó que de la misma forma, los modelos de pronósticos internacionales tampoco tenían previsto que el huracán evolucionara como lo hizo ni que llegara a Acapulco, por lo que lo consideró un evento “atípico” y “un escenario poco probable”.
“De acuerdo con el CENAPRED, los modelos de pronósticos internacionales no tenían prevenían en un inició que el el huracán evolucionara como lo hizo mucho menos que afectará al puerto de Acapulco, lo que ocurrió el martes 24 fue algo atípico y un escenario poco probable.
“Se rompió el récord histórico de intensificación de México que era de 24 horas con el huracán Patricia en el 2015″, puntualizó.
La funcionaria federal informó que 27 personas fallecieron tras el paso del huracán, entre ellos un elemento del Ejército que sufrió el deslave de su domicilio, además de que cuatro más están desaparecidas, de las cuales tres son elementos de la Secretaría de Marina (SEMAR).
Destacó que ‘Otis’ “generó cientos de destrozos” en Guerrero en miles de inmuebles como hospitales, hoteles, casas y negocios, como inundaciones, cristales rotos y daños en fachadas.
Asimismo, mencionó que el fenómeno meteorológico también provocó que se desconectaran 27 sensores sísmicos del Sistema de Alertamiento Sísmico (SASMEX) en Guerrero, Michoacán y Oaxaca, los cuales, según estimaciones del CIRE, tardarán en reconectarse debido a que las afectaciones en los caminos y carreteras.
Por ello, reafirmó que en caso de que haya un sismo con epicentro en una de las zonas donde se desconectaron los sensores, no se podrá advertir a la población con anticipación a través de la alerta sísmica.