A cinco días de que las instalaciones del CCH Azcapotzalco fueran tomadas y cerradas por un grupo de supuestos estudiantes, las autoridades de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) reveló que ya tienen ubicados a varios de los responsables de los ataques contra docentes.
Por medio de un comunicado, la institución educativa más importante del país detalló que al menos 9 personas de las que ingresaron al inmueble ya fueron identificadas y se procederá de forma contundente contra ellos.
“En seguimiento a las acciones realizadas para identificar a las personas que vandalizaron las instalaciones, esparcieron gasolina y prendieron fuego al personal administrativo y docente que resguardaba el edificio de la dirección del Colegio de Ciencias y Humanidades, plantel Azcapotzalco, el pasado 20 de octubre, la Universidad Nacional Autónoma de México informa:
1.- Hasta el momento se ha podido identificar a nueve presuntos responsables, quienes ya han sido denunciados penalmente ante las instancias de procuración de justicia por la presunta comisión de conductas delictivas.
2.- La Universidad, a través de sus autoridades competentes y de acuerdo con lo establecido en su legislación, ha procedido a la expulsión provisional de estas personas y remitirá el caso al Tribunal Universitario.
3.- Apegada al cumplimiento estricto de la legalidad, la UNAM continuará con las investigaciones que permitan la identificación del rostro de los agresores para proceder de manera consecuente”, explica el escrito.
¿Qué sucedió en CCH Azcapotzalco?
En una serie de paros que se han suscitado en diversos planteles de la máxima casa de estudios, el que más violencia presentó fue en la zona de Azcapotzalco, donde varias personas resultaron heridas debido a la violencia que se utilizó para tomar las instalaciones.
Se dice que fue un grupo de alrededor de 50 o 60 personas quienes ingresaron de forma indiscriminada y no permitieron que algunos maestros pudieran abandonar el lugar cuando comenzaron a hacer pintas, destrozos y hasta incendios en la dirección poniendo en riesgo su vida.
En un inicio se dijo que demandaban mejorar las condiciones de la escuela, fumigación ante una supuesta plaga de chinches y especial atención a la ola de inseguridad y acoso que sufre el alumnado en las instalaciones e inmediaciones. Sin embargo, con el paso del tiempo, la manifestación se convirtió en enfrentamientos y actos vandálicos que comprometen la seguridad de todos los estudiantes.