El pasado jueves 19 de octubre, se informó que el exlíder del Sindicato de Trabajadores de Petróleos Mexicanos (STPRM), Carlos Romero Deschamps, había muerto a los 79 años de edad, en su casa ubicada en la Ciudad de México.
Según los primeros reportes, Romero Deschamps murió la noche del jueves por un infarto cardiaco, esto a pesar de que su familia afirmó desconocer que tuviera alguna afección.
Romero Deschamps, a lo largo de su carrera, tuvo diversas polémicas. Pero no solo él, también sus familiares más cercanos estuvieron involucrados en escándalos.
Uno de los más sonados de estos, fue cuando supuestamente se vio a su hijo José Carlos manejando un automóvil Ferrari de color dorado, auto valuado en millones de dólares, en Mónaco. El hecho nunca fue confirmado por Romero Deschamps, quien llegó a aceptar que le había regalado un Ferrari a su hijo, pero de color rojo.
En ese momento, mucho se especuló sobre si el dueño del Ferrari dorado era José Carlos Romero Durán, hijo del exlíder sindical, o el hijo del presidente brasileño Lula Da Silva. El ferrari dorado con el que presuntamente se vio al hijo de Romero Deschamps es un modelo California T.
Este no es el único escándalo con el que se ha relacionado a algún hijo de Romero Deschamps. Y es que quien estuvo al frente del sindicato de Pémex por 26 años, fue padre de tres hijos: José Carlos, Paulina y Alejandro Romero Durán.
En 2012, por ejemplo, la prensa exhibió la riqueza que Paulina presumía sobre su vida: viajes en jets privados en todo el mundo, bolsos de miles de dólares y lujos que hasta sus perros tenían.
El Ferrari rojo que Romero Deschamps le regaló a su hijo José Carlos, habría tenido un valor de dos millones de dólares.