Durante la conferencia de prensa matutina, el presidente Andrés Manuel López Obrador celebró que por fin haya comenzado ya la distribución de los libros de texto gratuito en el estado de Chihuahua, luego de que padres de familia se ampararan en contra de la resolución de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) que ordenaba repartirlos.
“Acaba de darse una cosa importantísima en Chihuahua, no se permitía la distribución de los libros, quienes presentaron los amparos se desistieron porque se dieron cuenta que no era correcto lo que estaban haciendo y ya se están distribuyendo”, dijo.
El mandatario felicitó a los padres de familia que desistieron del recurso que habían interpuesto y también extendió la felicitación a los maestros que pusieron todo de su parte para que se pudieran repartir los libros de texto en las escuelas.
¿Por qué no habían entregado los libros en Chihuahua?
El conflicto en torno de la repartición de libros de texto gratuitos se remonta a inicios del Ciclo Escolar 2023-2024, cuando la gobernadora de Chihuahua, Maru Campos, y el de Coahuila, Miguel Riquelme, presentaron una controversia constitucional para frenar la entrega al considerar que los ejemplares carecían de sustento científico y contenían errores. El recurso fue concedido por el ministro Luis María Aguilar, lo que desató la molestia en Presidencia y en la Secretaría de Educación Pública (SEP).
Dichas entidades -gobernadas por la oposición- fueran las únicas que no repartieron libros, por lo que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) discutió si la entrega de los ejemplares era competencia federal o si los estados tenían capacidad para interponerse; el pasado 4 de octubre, la Primera Sala desechó la controversia interpuesta por el gobierno de Chihuahua y ordenó la inmediata distribución.
La panista Maru Campos se reunió con líderes sindicales del magisterio y dijo que acataría la orden, sin embargo, algunos padres de familia tramitaron dos amparos para evitar la repartición, pese a que 53 por ciento de las escuelas de nivel básico ya contaban con sus ejemplares. En consecuencia, las escuelas restantes se quedaron sin libros -aproximadamente seis mil planteles- y sus profesores decidieron convocar a paro de actividades en tanto no se reanudara la entrega.
Las secciones 8 y 42 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) acusaron que estaban afectando el derecho a la educación de unos 725 mil estudiantes. Incluso en el municipio de Madera, algunos maestros y papás de alumnos irrumpieron en almacenes y extrajeron varias cajas que contenían ejemplares, informó Max Arriaga, director de materiales Educativos de la SEP.
El paro fue levantado en las últimas horas de este martes 17 de octubre, luego de que las personas que se habían amparado desistieran del recurso.