Pobladores de la localidad de Frontera Corozal, en Chiapas, retuvieron a un grupo de policías y hasta el momento se desconoce su paradero. Esto ha generado un panorama de incertidumbre sobre el paradero de los uniformados, toda vez que sus familiares se han manifestado para exigir su respectiva liberación.
De acuerdo con los informes oficiales de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSyPC) de Chiapas, en total fueron ocho miembros de la Policía estatal preventiva los que fueron retenidos en el municipio de Ocosingo. Entre ellos se encuentra siete hombres y una mujer.
Los oficiales han sido identificados como Gilberto Nanguelú Moreno, Ramón Sánchez Cruz, Pascual Roque Bolón, Julio César Bolón, Juan Carlos Hernández Salinas, Daniel Alberto Gómez Jiménez, Edivaldo Vázquez Pérez y Thania Alejandra Sánchez Blás, según reportes de Proceso.
“Los elementos de la Policía estatal se encontraban realizando sus funciones policiales en dicha comunidad; sin embargo, al existir inconformidad por parte de un grupo de habitantes, fueron retenidos”, indicaron las autoridades chiapanecas en un comunicado.
Aunque no se dieron a conocer las razones de dicha “inconformidad”, informes de la prensa local indican que los pobladores desarmaron a los policías y los llevaron a una cárcel ejidal. Lo anterior ya que supuestamente no garantizaban seguridad en la región, pues los acusaron de favorecer a un células delictivas de la zona.
Pese a estos señalamientos, la SSyPC aseguró que se han llevado acabo acciones para atender la situación. Como parte de estas medidas, se estableció una mesa de diálogo en Palenque y en Frontera Corozal. “Se continúan realizando acciones de atención a través del área de Derechos Humanos de esta institución para que a la brevedad los compañeros sean liberados”, agregaron.
Aunado a ello, se presentó la denuncia correspondiente por estos hechos ante la autoridad ministerial, con la finalidad de esclarecer lo sucedido y deslindar responsabilidades. En cuanto a los familiares de los policías retenidos, se informó que les ofrecieron alimentos y un lugar en las instalaciones de la institución para que puedan permanecer mientras se cumplimenta su liberación.
Y es que hasta el domingo 15 de octubre, sumaban 72 horas de que los oficiales permanecen “encarcelados” en dicha comunidad. Debido a ello, los familiares de los ocho policías se manifestaron en las inmediaciones de la SSyPC en Tuxtla Gutiérrez ante la falta de resultados, pues hasta la edición de esta nota no han sido liberados.
En ese sentido, cerraron el Libramiento Sur y solicitaron apoyo a la secretaria Gabriela Zepeda y al gobernador estatal, Rutilio Escandón, para que tomen cartas en el asunto. “Dicen ellos que no es secuestro, ¿cómo se le puede llamar a eso? Si les quitaron sus pertenencias, vandalizaron los vehículos, los desarmaron”, aseveró Rosa Aurora Trinidad, familiar de uno de los policías, según reportes de El Heraldo.
El gobernador Rutilio Escandón no ha emitido un pronunciamiento al respecto, por lo que se desconoce si se tomarán medidas adicionales ante estos hechos.