Fue en 2020 cuando se registraron los primeros ataques con drones en México. En aquel entonces los drones empezaron como transportes de explosivos pero en tres años han evolucionado a tal grado que algunos de ellos han sido modificados para llevar venenos o pesticidas para actuar como una especie de bombas químicas.
Hace tres años, el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) atacó el poblado de Tepalcatepec, Michoacán, con explosivos tipo C4 que fueron trasladados a través de artefactos voladores. Las autoridades que recuperaron los artefactos, informaron que estaban compuestos de tubos galvanizados de aproximadamente 10 centímetros de largo, rellenos de balines, pólvora y pedazos de metal, que al momento de la explosión actuaban como esquirlas.
Sin embargo, recientemente se registró un ataque inédito con drones en el municipio de Aquila, cerca de la costa michoacana y los límites con el estado de Colima. Grupos de autodefensas hallaron drones que trasladaban objetos con caracterísitcas que no se habían visto hasta el momento.
Eran explosivos cargados con veneno o pesticidas utilizados en agricultura como el “Furadan”.
“Esto es lo que nos han venido aventando desde hace tiempo, este explosivo que nos avientan en un dron, trae pólvora y trae veneno que se llama furadan que los usan para que cuando llegue la fumata se intoxique la gente, ya nos intoxicaron a un compañero”, declaró un miembro de los grupos de autodefensa a Milenio.
De acuerdo con los grupos de autodefensa invlucrados en dichos ataques, el afectado por la “bomba química” resultó con daños en los pulmones y las aticulaciones.
“Lo llevamos a los médicos locales que hay, se ha atendido lo más que se ha podido, y se afectó pulmones, se le dañaron totalmente; a veces le batalla para moverse, a veces le duelen los pies y las manos, no puede caminar”, detalló el entrevistado.
Los mismo grupos estiman que en los últimos 10 meses s ehan registraro más de treinta ataques de este tipo.
A principios de año, policías comunitarios denunciaron que en el municipio de Coahuayana, en la zona costera, informaron que habían hallado una docena de explosivos metálicos que tenían adheridos envases de cristal con un polvo blanco en su interior.
El Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) es una de las pocas agrupaciones criminales de México que ha implementado el uso de drones para llevar a cabo ataques con explosivos, ya sea en contra de los grupos rivales o para agredir a las fuerzas de seguridad pública.
Para realizar estas tácticas de combate, la organización liderada por Nemesio Oseguera Cervantes, alias “El Mencho”, ha creado una unidad especializada en el manejo de este tipo de artefactos, conocida como “Operadores Droneros”.
Los drones tienen diferentes usos: tomar fotografías aéreas, enviar paquetes, distracción y uno más peligroso: el bélico.
Los militares, en particular en Estados Unidos, fueron los primeros en probar esta tecnología al combinar aeronáutica y robótica en los años 70.
Las ventajas del uso de drones para los ejércitos respecto a un avión tripulado son: reducción de costos debido a ser más barata su fabricación,su tamaño, son más precisos y una mayor probabilidad de pérdidas humanas para las fuerzas militares, de acuerdo con un artículo de difusión de el Tec de Monterrey.
En México, el Ejército utiliza drones como parte de sus herramientas para combatir al crimen organizado.