La popularidad de los vapeadores en México va en aumento, a tal grado que incluso niños de primaria eh Hidalgo fueron sorprendidos en posesión de algunos de ellos luego de que las autoridades del estado realizaran el operativo “mochila segura”.
Esta situación encendió los focos rojos en maestros, directivos y padres de familia quienes al desconocer el aspecto de estos dispositivos electrónicos no pueden reconocerlos y prevenir a los menores de edad sobre su uso y consecuencias.
Aunado a ello, la facilidad con la que pueden comprar estos artículos ha sido un punto determinante para que tengan libre acceso ya que no existe una regulación por parte de las autoridades respecto a su venta alrededor del país. Por lo que es mucho más fácil encontrarlos en tiendas informales o de forma clandestina en sitios como tiendas de regalos o hasta lugares donde donde se venden y reparan teléfonos móviles.
SSC de Hidalgo encuentra vapeadores en mochilas
Siguiendo con los protocolos de seguridad para los alumnos de educación básica, la Dirección de Prevención del Delito en Tulancingo, Hidalgo, indicó que alrededor de 23 escuelas de primaria, secundaria y preparatoria han sido revisadas para prevenir delitos o problemas con sustancias ilícitas.
Entre los hallazgos más controversiales se encuentran cigarros electrónicos (mejor conocidos como vapers), cúteres, tijeras y artículos no relacionados con los deberes escolares, situación que preocupa a la entidad.
De acuerdo con la titular de la Secretaría de Seguridad Ciudadana del estado, Claudia Espinoza, es muy preocupante que niños que acuden a las primarias hidalguenses estén en contacto directo con productos como los vapeadores ya que pueden generar una dependencia a las sustancias que genera un gran peligro para la salud.
“Acudimos a los planteles con temas de prevención del bullying, acoso escolar, adicciones ahora, incluyendo el cigarro electrónico, porque muchos de los casos son desde nivel primaria quienes lo consumen”, indicó.
Cabe destacar que estos objetos son muy fáciles de disimular ya que regularmente se confunden con plumas, plumones o borradores pues su diseño es muy pequeño y dependerá de su durabilidad el costo que tenga. Los desechables pueden alcanzar un precio de entre 60 y 120 pesos, mientras que los que son recargables llegan a costar de 150 a 350 pesos.
Si bien al inicio parecen precios poco accesibles, en comparación con los cigarros de tabaco un vapeador puede alcanzar entre 2 mil 500 y 6 mil inhalaciones, lo que daría un total de 80 a 127 cigarrillos.
Esta situación ha generado preocupación entre los padres de familia quienes desconocían totalmente la situación por la que atraviesan las escuelas de nivel básico, por lo que las autoridades advierten que hay que estar muy atentos a los productos que adquieren sus hijos, así como hablar sobre las consecuencias de éstos.