El gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, reconoció que los grupos criminales asentados en el estado contratan a personas extranjeras para diferentes servicios, como quedó evidenciado el pasado fin de semana con la detención de un grupo de colombianos que trabajaban para ‘Los Viagras’.
En su conferencia de prensa de este lunes, el mandatario estatal fue cuestionado por las múltiples detenciones que se realizaron en la localidad de Catalinas, ubicada en el municipio de Buenavista, donde se desmanteló una célula que se dedicaba a la fabricación de explosivos para drones.
Bedolla indicó que esta no ha sido la única ocasión en que las autoridades logran detener a personas de otros países vinculadas con grupos delincuenciales. “Es una detención relevante. Son ocho colombianos, son los que tenemos detenidos hasta el momento. Pero sí se han dado otros casos”, señaló.
En ese sentido, informó que la mayoría de extranjeros detenidos en Michoacán provienen de Colombia y El Salvador, mismos que son contratados por el crimen organizado para distintas tareas, aunque no especificó cuáles.
“Normalmente son salvadoreños y colombianos. Por lo que se denota, sí ocurren estas detenciones, lo que indica que sí hay participación. De alguna manera algunas bandas delincuenciales contratan este tipo de servicios a extranjeros”.
Sin embargo, descartó que lo anterior esté relacionado con los flujos migratorios, pues indicó que en la entidad no pasan las rutas usadas por los indocumentados.
“Michoacán no está dentro de las rutas migratorias de Centroamérica. Normalmente, esas rutas cruzan por el Bajío, pero sobre todo por el Golfo (de México), por Veracruz, por Puebla, por el centro del país”, precisó Ramírez Bedolla.
Aunque desde el 2019 se ha detectado la presencia de colombianos en Michoacán que se dedican a robos de casas, hasta el momento no se había evidenciado la conexión que tienen con organizaciones criminales de México.
Fue el pasado 8 de octubre cuando quedó al descubierto una célula de Colombia que fabricaba explosivos para drones, mismas que había sido contratada por Los Viagras, un grupo criminal que perpetra sus ataques aéreos en la zona de Tierra Caliente.
En aquella ocasión, fueron detenidos ocho colombianos que no contaban con los documentos necesarios para transitar libremente por el país. Luego de una revisión preventiva, les aseguraron cuatro artefactos explosivos improvisados, una pistola calibre .38 super, 16 cargadores y mil 040 cartuchos útiles de múltiples calibres.
Lo anterior ocasionó que se realizaran bloqueos carreteros en distintos puntos de Buenavista y Apatzingán. A pesar de que incluso se incendió un vehículo de carga, la rápida respuesta de la Base de Operaciones Interinstitucionales (BOIS) permitió liberar las vialidades.