A nueve años de la desaparición forzada de 43 normalistas, Alejandro Encinas Rodríguez, subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación (Segob), presentó el segundo informe de la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia del Caso Ayotzinapa, el cual contempla una detallada línea del tiempo sobre cómo se perpetró el crimen en contra de los jóvenes en la ciudad de Iguala, Guerrero.
El funcionario federal detalló que la reconstrucción de los hechos fue gracias a las intervenciones que realizaron elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) en las comunicaciones de varios de los implicados, algunos pertenecientes a la organización delictiva “Guerreros Unidos”, a quienes se les atribuye la desaparición de los estudiantes hacia finales de septiembre de 2014.
Los hechos ocurrieron durante la noche del 26 y la madrugada del 27 de septiembre, cuando los alumnos de la Escuela Normal Rural ‘Raúl Isidro Burgos’ llegaron en camiones a la ciudad de Iguala y policías municipales los atacaron a tiros, de acuerdo con un comunicado del Centro de Derechos Humanos ‘Miguel Agustín Pro Juárez’, organización civil que acompaña el caso.
Los normalistas viajaban a bordo de cinco camiones y llegaron a Iguala para botear y recaudar fondos para poder asistir a la marcha conmemorativa del 2 de octubre en la Ciudad de México. Encinas puntualizó que todas las autoridades estaban enteradas de la presencia de los estudiantes en la ciudad de Iguala.
Revela detalles sobre el asesinato de uno de los normalistas
El saldo de estos hechos que consternaron no solo a México, sino al mundo, fue de 43 jóvenes desaparecidos, al menos 40 heridos y seis personas asesinadas, entre ellas el normalista Julio César Mondragón Fontes, a quien encontraron sin vida un día después luego de ser secuestrado. Al joven lo golpearon, le robaron el teléfono y después de muerto, le quitaron el rostro.
Durante la presentación del segundo informe del Caso Ayotzinapa, Alejandro Encinas brindó más detalles sobre el homicidio del joven, todos ellos provenientes de las declaraciones de testigos: “Se lo llevaron en una camioneta y lo sometieron en el camino de terracería”, precisó el subsecretario de Gobernación.
Asimismo, el funcionario agregó que miembros de “Guerreros Unidos” confirmaron la participación de varios agresores en el ataque al normalista Julio César Mondragón, incluso algunos de ellos habrían declarado que lo desollaron después de haberlo asesinado extrajudicialmente. Según la relatoría de las organizaciones que acompañan el caso, el joven fue el primero en bajar de un camión ante el ataque y habría sido también al primero que se llevaron.
El cuerpo del joven de 23 años -y padre de una niña pequeña- fue hallado con evidentes signos de tortura la mañana del 27 de septiembre de 2014 en la colonia Ciudad Industrial, muy cerca de las instalaciones del Centro de Control, Comando, Comunicación y Cómputo (C4) de la ciudad de Iguala.
Alejandro Encinas también desmintió la versión dada por el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) para el caso Ayotzinapa que sugería que Julio César no había sido hallado en Ciudad Industrial de Iguala sino en los límites con el municipio de Taxco. “Los indicios y evidencias con que contamos, e incluso con evidencia de la familia, todo nos confirma -junto con las declaraciones- que fue ultimado en Ciudad Industrial”.