El supuesto romance que Galilea Montijo habría tenido con Arturo Beltrán Leyva (exlíder de un cártel de narcotráfico en México) hace aproximadamente dos décadas quedó al descubierto en Emma y las otras señoras del narco, un libro de investigación periodística que Anabel Hernández lanzó en 2021.
En ese entonces, la famosa conductora de Televisa negó haber tenido algún vínculo con El Barbas u otra persona relacionada con el crimen organizado y aseguró que demandaría a la periodista por difamación. Sin embargo, esto último nunca pasó.
Anabel Hernández asegura que Galilea Montijo no cumplió su ‘amenaza’
Fue en una entrevista que la periodista concedió para Chisme no like donde reveló que Galilea Montijo no levantó una demanda en su contra por difamación como lo había prometido:
“La señora Galilea Montijo nunca me demandó, hasta el día de hoy. El libro de Emma fue publicado hace ya muchos meses y hasta el día de hoy no me ha demandado”.
Sin embargo, no descartó la posibilidad de que la actual conductora de Hoy o Televisa emprendan una batalla legal en su contra tras confirmar que existía un catálogo de artistas y revelar que Galilea Montijo recibía una cuota mensual del capo por “sus servicios”, todo esto con base en el testimonio que una expareja del propio narcotraficante compartió con ella.
“Es importante aclara que pese a esta escena, no sé cómo llamar de otra manera a esta escena de la señora Galilea Montijo, que además debo decir que estas investigaciones no tienen nada de personal (...) no tienen un fin de perseguir, de justiciar, de juzgar a nadie, aquí se trata de dar la información que la gente, sobre todo las víctimas de estos cárteles, necesita saber para entender por qué esta ola de violencia no se detiene”, comentó.
Anabel Hernández aseguró que no solo Celeste (supuesta expareja de Beltrán leyva) es testigo de la relación que habría tenido Galilea Montijo con el capo, también otros miembros de la organización presenciaron las convivencias en una lujosa casa ubicada en la Ciudad de México.
“Estas mujeres saben que no sólo Celeste las vio”, dijo la periodista.
“Era necesario explicar hasta qué nivel estas mujeres alimentan a la bestia. Va mucho más allá del ego, realmente es una cosa psicológica, emotiva, porque además se sienten amados, tienen que pagar miles y miles, diría yo, a Galilea Montijo más de miles, dicen que le daba hasta 200 mil dólares al mes al inicio por su compañía emotiva y sexual”.
Asimismo, Anabel Hernández contó que varios miembros de la organización delictiva se llegaron a molestar con El Barbas porque supuestamente le pagaba mejor a Galilea Montijo que a ellos mismos, incluso, esto habría dado pie a una fuerte discusión.
“Los propios sicarios y lugartenientes de Arturo Beltrán Leyva estaban enojados, les parecía indignante. Se sentían ofendidos por su propio jefe porque ¿por qué le pagaba tanto dinero a una mujer que no arriesgaba la vida por él y a ellos les pagaba menos”, dijo.
“Estamos hablando de narcotraficantes que gracias a estas relaciones interpersonales se empoderaban, se alimentaban y salían a la calle a delinquir y a hacer sufrir a tantos millones de mexicanos”.