El Bajío en México vuelve a posicionarse como uno de los lugares turísticos predilectos para los amantes de la música, la buena comida y la cultura.
En 2020 un fenómeno muy importante comenzó a gestarse en la ciudad de León, Guanajuato, desafortunadamente debido a la pandemia de Covid-19 y el confinamiento mundial el gran suceso tuvo que posponerse. Finalmente en septiembre de 2022, el festival Candelabrum Metal Fest tuvo su primera edición con un cartel que impresionó a diversas generaciones de fans y conocedores del metal.
En los últimos cinco años aproximadamente, México ha tenido una apertura mucho mayor en cuanto a festivales y conciertos, en consecuencia su oferta de bandas y artistas se mantienen en apogeo.
Un claro ejemplo del panorama es precisamente este festival que nació en el Bajío, una zona estratégica que además de la riqueza cultural con la que cuenta ha logrado descentralizar los conciertos, pues generalmente si un fanático del metal y el rock desea ver a una de sus bandas favoritas tiene que trasladarse a Jalisco, Nuevo León o Ciudad de México. Porque previamente Guanajuato no aparecía con tanta frecuencia en el mapa en cuanto a eventos del género del metal
Para 2023 Candelabrum celebró su segunda edición en la Velaria de la Feria en León, Guanajuato. Y con dos festivales fue suficiente para hacer historia, pues con una minuciosa organización consiguieron juntar en un solo escenario a leyendas, pioneros y exponentes del metal nunca antes vistos en México.
El pasado 2 y 3 de septiembre, metaleros de toda la República Mexicana y de América Latina arribaron a León para disfrutar por primera vez un cartel integrado por agrupaciones como Satan, Vio-lence, Autopsy y Paradise Lost; bandas con las que antes solamente se podía soñar o era necesario viajar a Europa para poder verlos en vivo.
En Candelabrum Metal Fest, un total de 25 grupos tanto nacionales como internacionales dejaron todo sobre el escenario.
“Se presentaron bandas nacionales como Cathartic, For Centuries, Starforce y Annapura, así como los veteranos de Majestic Downfall y Agony Lords, los cuales compartieron escenario con Dark Tranquility, Draconian, Immolation, Autopsy, Paradise Lost, Vio-lence, Hulder, entre varios más fueron los encargados de no dar tregua a sus seguidores , entre el slam y headbanging”
De esta manera, el festival logró dejar una huella, que va más allá de música alternativa, rock y metal en todas sus variantes. Este tipo de eventos masivos tienen un impacto que definitivamente marcará un precedente en la escena musical actual del país.
En primer lugar, se rompió la barrera generacional, del espacio, el lenguaje y cultural, pues cientos de fanáticos tuvieron la posibilidad de disfrutar bandas que van desde el black metal sueco de los años 90s, el heavy metal de la “nueva ola” británica, black death directo de Gotemburgo y por supuesto, el metal hecho en México.
En esta edición de Candelabrum Metal Fest ocurrió algo inédito, México y Suecia reforzaron su alianza al hacer posible la llegada de cinco bandas originarias del país nórdico a nuestro país. En ocasiones este tipo de sucesos pasa desapercibido o no se le da la suficiente importancia, no obstante es un pilar fundamental para el intercambio cultural entre países. En este caso Suecia y México comparten una gran pasión por la música, por tal motivo es que aquí existe una de las bases de fans más grandes del metal.
La naturaleza, el misticismo, la obscuridad, incluso el frío y el bagaje cultural sueco encajan perfectamente con el gusto del público mexicano. Dark Tranquility, Draconian, Sacramentum y Mörk Gryning tuvieron un caluroso recibimiento y de parte de los músicos, su entrega fue absoluta sobre el escenario.
Con el movimiento metalero en León, Guanajuato se evidenciaron una serie de cambios en el ámbito turístico, destacó la comida, pues en el espacio del festival fue posible que los mismos mexicanos conocieran más sobre la gastronomía leonense. Las famosas guacamayas acompañadas de una refrescante cebadina saciaron el apetito de la audiencia.
De igual manera la industria de la piel y el calzado que caracteriza a ésta ciudad guanajuatense, brillaron nuevamente. Lo curioso y a la vez fascinante, es que los comerciantes adaptaron su mercado a la venta de artículos utilizados por los fans del metal y el rock.
Por ejemplo, en vez de ofertar solamente chamarras de piel básicas, lanzaron chaquetas modificadas con estoperoles, parches y más. Las muñequeras, bolsas, cinturones, ropa, y sombreros como los de Lemmy Kilmister abundaron en el mercadillo.
Cabe destacar que en el Bajío se está dando una apertura nunca antes vista para el género del metal, la escena está muy fuerte y pronto nos dará una gran sorpresa. La trabajadora ciudad de León se está redimiendo con los fanáticos que por muchos años guardaron celosamente su admiración por los ídolos del rock y el metal.
Recordemos que en el lejano 1989 el concierto de la mítica banda de heavy metal, Black Sabbath que se llevaría a cabo en el estadio Nou Camp en León, Guanajuato fue cancelado.
Quien lo diría, los años no pasan en vano, en ese entonces la presión social, la ignorancia de ciertos temas y una serie de prejuicios acabaron con aquella gran noche de octubre. Pero desde 2020 se escribe otra historia para México.