El Senado de la República aprobó, en 20 minutos y por unanimidad, la reforma constitucional que elimina la posibilidad de que México cuente con un doble Congreso de la Unión, debido a que los legisladores de la presente legislatura durarán en su cargo hasta el 31 de agosto del próximo año y no en el mes de julio.
Es decir, de no haberse aprobado este cambio al artículo 65 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos (CPEUM), al seguir los diputados y senadores en su cargo hasta el último día de agosto, el país hubiera contado con mil diputados y 256 senadores activos.
Con esto, los actuales legisladores permanecerán en su cargo hasta el 31 de agosto de 2024; mientras que los electos en los comicios del próximo año asumirán su encomienda hasta el 1° de septiembre, mismo día que tomará protesta la o el nuevo Presidente de la República.
“(...) el Congreso se reunirá a partir del 1 de septiembre de cada año para celebrar un periodo de sesiones ordinarias, excepto cuando el Presidente de la República inicie su encargo, en cuyo caso se reunirá a partir del 1 de agosto”, la parte subrayada fueron las palabras que se agregaron.
De acuerdo a los legisladores, dicho cambio ayudará a la planeación y al desarrollo eficiente de las tareas de todo el Congreso de la Unión, especialmente una crisis presupuestal.
Cómo quedará el trabajo de diputados y senadores
- Diputados: su cargo durará 36 meses, a partir del 1° de septiembre de 2024 hasta el 31 de agosto de 2027.
- Senadores: el cargo durará 72 meses, que abarcará el 1° de septiembre de 2024 al 31 de agosto de 2030.
¿Qué sigue?
Tras la aprobación de la Cámara Alta, ahora le corresponde a, por lo menos, 17 Congresos locales aprobar la reforma con el fin de que se emita la declaratoria de constitucionalidad. Una vez que se tenga ese último paso, se publicará en el Diario Oficial de la Federación (DOF), la cual entrará al día siguiente de su publicación.
“(Con esta reforma) evitamos esta discordancia jurídica para que no exista doble Congreso, se debe endosar que fue un error del pasado, de esas legislaturas, no de nosotros y, por eso, vamos a enmendar ese error”, explicó el senador del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Alejandro Armenta Mier, previo a que se votara y pasara la reforma con 92 sufragios a favor.
El conflicto se presentó tras la aprobación de la reforma política de 2014, durante el sexenio del presidente Enrique Peña Nieto (EPN), en donde se estableció cambio de fecha para la toma de protesta del mandatario el 1° de octubre y ya no el 1° de diciembre, como se realizó por años, además de instalar el Congreso de la Unión cada 1° de agosto.
Fue por eso que la Cámara de Diputados aprobó, el pasado 7 de septiembre, al considerar, según el diputado Santiago Torreblanca Engell, que al tener ese problema legislativo no sólo habría un conflicto presupuestal o la imposibilidad de sesionar, sino que era peligroso para el trabajo de uno de los Poderes de la Nación.
Asimismo, en marzo del presente año, fue el diputado del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Rubén Moreira Valdez, el que presentó una iniciativa para reformar dicho artículo: “Las democracias actuales requieren de ajustes constantes para hacer frente a los restos sistémicos. Su integridad depende del desarrollo de reglas que permitan garantizar su estabilidad en contextos de alto flujo político y su capacidad de adaptarse continuamente”.