Esta mañana, el presidente Andrés Manuel López Obrador aplaudió la decisión de un juez estadounidense, quien ordenó a Texas retirar boyas en río Bravo en la frontera con Estados Unidos.
Sobre la iniciativa del gobernador de Texas, Greg Abbott, quien ordenó colocar el también llamado “muro flotante”, el mandatario indicó que se trata de una decisión “arbitraria y violatoria” de la soberanía.
“Tengo que agradecerle a las autoridades de Estados Unidos, a la Fiscalía que fue la que presentó esta denuncia y al juez que resolvió que se deben quitar antes del 15 las boyas del río Bravo”, dijo desde Palacio Nacional.
Y es que el gobierno que preside AMLO, se pronunció en contra la decisión del gobernador Greg a través de notas diplomáticas, donde aseguró que las boyas gigantes ocupaban al menos 230 metros de longitud del territorio nacional.
“Claro, pueden apelar (al gobierno estadounidense), pero como no les asiste la razón, y es un acto prepotente de arrogancia, no van a poder imponerse”, dijo desde el Palacio Nacional.
También agradeció a su homólogo, Joe Biden, ya que aseguró que se trató de una iniciativa de éste y tras la solicitud del gobierno mexicano, de acudir al tribunal de EEUU.
“Ayer se resolvió esto y es una buena noticia para el pueblo de México”, enfatizó el mandatario al encabezar su conferencia matutina.
Las impresionantes balizas naranjas fueron ancladas al fondo del río, colocación que se suma al alambre de púas que ya había sido instalado con anterioridad.
Decisión del juez
De acuerdo con la información, un juez federal de EEUU ordenó al estado de Texas retirar las grandes boyas flotantes, que se encuentran situadas en el río Bravo y cuyo objetivo era impedir la llegada de los migrantes, antes del 15 de septiembre.
Además, la Justicia estadounidense, ha prohibido al estado construir o colocar nuevas boyas en la zona, luego de una demanda interpuesta por la administración del presidente Joe Biden contra la instalación del gobernador republicano Greg Abbott, donde se han encontrado los cuerpos de al menos dos personas.
De ese modo, el magistrado David Ezra estableció el fallo, pues dio a conocer que las boyas obstruyen la libre navegación en el río Grande, violando así una ley histórica que rige las vías navegables controladas por el Gobierno federal.
Después de la decisión, se dio a conocer que las oficinas del gobernador apelará a este fallo, ya que lo considera como incorrecto.