Ofelia Hernández Salas, mejor conocida como “Doña Lupe”, fue extraditada a Estados Unidos (EEUU) por su presunta responsabilidad en el tráfico de personas. La mujer de 61 años, además de encabezar una organización criminal de contrabando, tenía nexos con el Cártel de Sinaloa, por lo que era un objetivo prioritario para la justicia estadounidense.
Su entrega a las autoridades del país vecino se realizó el 5 de septiembre, día en el que estaba prevista su comparecencia inicial ante el Tribunal Federal de Phoenix, Arizona, donde enfrenta cargos por el delito mencionado.
La fiscal general de la División Penal del Departamento de Justicia, Nicole M. Argentieri, reconoció el trabajo realizado por la Fuerza Operativa Conjunta Alfa para desmantelar las agrupaciones delictivas transnacionales que se dedican a cruzar migrantes a EEUU de manera ilegal.
“Esta extradición es el resultado de la coordinación continua entre el Departamento de Justicia y nuestros socios mexicanos encargados de la aplicación de la ley para llevar ante la justicia a los traficantes de seres humanos que se aprovechan de la desesperación de los migrantes y socavan el Estado de Derecho”, expresó Argentieri.
La organización criminal de ‘Doña Lupe’
Ofelia Hernández Salas nació el 27 de junio de 1962 en el estado de Guerrero. Comenzó su carrera delictiva en la década de 1990, cuando tenía alrededor de 28 años, mediante la falsificación de identidades. Su primera detención ocurrió en marzo de 2008 en el condado de Orange, ya que había ingresado al país vecino del norte sin permiso.
En 2012 fue deportada a México luego de haber sido condenada a 18 meses de prisión y tres años de libertad supervisada. Su última captura se llevó a cabo el 16 de marzo de este 2023 en la colonia Zacatecas, ubicada en Mexicali, Baja California.
De acuerdo con el Departamento de Tesoro de EEUU, “Doña Lupe” encabezaba una organización de contrabando de personas identificada como “Hernández Salas”, con sede en Mexicali. Al menos desde el 2018 se desempeñaba como “pollera”, es decir, que se dedicaba a cruzar a miles de personas por la frontera.
En los documentos judiciales se menciona que Ofelia conspiró para cruzar a migrantes de 19 países, como Bangladesh, Yemen, Pakistán, Eritrea, India, Emiratos Árabes Unidos, Uzbekistán, Rusia, Egipto, Brasil, Perú, Ecuador, Colombia, Costa Rica, Nicaragua, Honduras, El Salvador, Guatemala y, por supuesto, México.
Las autoridades estadounidenses estiman que las víctimas pagaban entre USD 10 mil y 70 mil por los servicios de contrabando. “Está implicada en la falsificación de documentos y la corrupción en México para introducir clandestinamente a migrantes indocumentados en Estados Unidos a través de la frontera sur y tiene vínculos con el Cártel de Sinaloa”, indicó el Departamento de Tesoro en un comunicado.
Para llevar a cabo el traslado de los migrantes, Ofelia utilizaba el Hotel Plaza y el Hotel Las Torres, entidades sancionadas por EEUU.
Entre los principales socios de “Doña Lupe” que han sido identificados se encuentran Jesús Gerardo Chávez Tamayo, originario de Sinaloa, “que facilita el cruce de migrantes y recibe pagos por servicios de tráfico de personas”, así como Fátima del Rocío Maldonado López, de Chiapas, quien se encargaba de alterar la documentación de las víctimas.
Por su parte, Federico Hernández Sánchez (de Guanajuato) introducía ilegalmente a las personas indocumentadas a EEUU, mientras que Raúl Saucedo Huipio (de Guerrero) facilitaba su transporte y alojamiento. Todos ellos fueron designados por la Oficina para el Control de Activos Extranjeros (OFAC, por sus siglas en inglés).