SCJN declaró ilegal la extinción de Fidecine, pero no regresa

La Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) determinó este miércoles como inconstitucional la extinción del Fondo de Inversión y Estímulos al Cine (Fidecine) a través de un decreto presidencial de hace tres años que modificó la Ley Federal de Cinematografía.

El proyecto presentado por el ministro Javier Laynez Potisek señala que, con base en el artículo 4 de la Constitución sobre el acceso a la cultura, Fidecine era el mecanismo que se encontraba en la ley con el que se garantizaba la participación en la industria cinematográfica.

Sin embargo, esto no quiere decir que regresa Fidecine, sino que ahora el Congreso de la Unión deberá garantizar el cumplimiento de este mandato constitucional antes de que concluya el periodo ordinario de este año. Pues si bien se señala que aunque se sustituyó con el Programa Fomento al Cine Mexicano (Focine), este no está contemplado por la ley.

“Su creación vulnera el principio de reserva de ley, al estar regulando una materia que es competencia exclusiva del Congreso Federal”, señaló la Corte en un comunicado.

El amparo en revisión 357/2022 fue analizado por el ministro Alberto Pérez Dayán, pero ante su ausencia fue Laynez Potisek quien se hizo cargo del asunto. La votación sobre el amparo en revisión se dio por mayoría de tres votos. El ministro Javier Laynez Potisek votó en contra.

Este año el Focine tuvo un presupuesto de más de 190 millones de pesos.

Ante esta resolución, la Secretaría de Cultura y el Instituto Mexicano de Cinematografía (IMCINE) afirmó que esto fortalecerá al mecanismo de apoyo, conocido como Focine.

De acuerdo con las autoridades, el Focine ha apoyado 428 proyectos a través de 12 convocatorias, desde su creación en 2021.

El Fidecine, junto con más de 100 fideicomisos, fue ordenado desaparecer por el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, en septiembre de 2020, habiendo contado con el respaldo de la mayoría del partido Morena en las cámaras de Diputados y Senadores.

En ese momento se argumentó que la extinción era constitucionalmente válida, para obtener recursos contra la pandemia de COVID-19 y evitar la “opacidad y discrecionalidad” con la que se manejaban, según AMLO.

Fidecine fue responsable de apoyar cintas comerciales desde 2002 y durante 18 años respaldó más de 200 largometrajes.

Su desaparición fue impugnada por la productora Springall Pictures SA de CV. El reclamo de Springall cayó en manos de la minsitra Loretta Ortiz, quien se ha caracterizado por votar a favor de los intereses de la 4T, así que creó un proyecto que bateaba su reclamo.

Sin embargo, fueron los ministros que terminaron por rechazar el proyecto a Ortiz, así que el asunto fue turnado a Pérez Dayán.

Asimismo, el pasado 25 de abril, los cineastas Guillermo del Toro, Juan Mora Catlet, Alfonso Cuarón y Alejandro González Iñárritu hicieron un llamado a la SCJN para que no apruebe la desaparición del Fidecine.

“El Fidecine fue un triunfo histórico de la comunidad cinematográfica y fruto de una lucha contra la censura y el verticalismo de las autoridades gubernamentales del sector”, manifestaron a través de una misiva.

También señalaron que la desaparición del fideicomiso atenta contra la Constitución al violar la garantía de los derechos humanos a la libertad de expresión y a la pluralidad cultural: “El Artículo 1 constitucional prohíbe la regresividad en esos derechos y en sus garantías. El decreto que extinguió Fidcine eliminó de la Ley esa garantía, y no la sustituyó por otra garantía que tuviera, al menos, el mismo nivel de protección. Eso es un retroceso”, expusieron.