El dark wave no ha muerto, Hoffen lo mantiene vivo con su sonido inspirado en The Cure

El género musical dark wave, caracterizado por la oscuridad, el amor por las artes y el existencialismo tiene sus raíces en movimientos como el post punk, new wave y el rock gótico de los años 80. Aunque se creía que la escena underground se extinguiría en el último decenio del siglo pasado, lo cierto es que se niega a desaparecer en la Ciudad de México.

Un ejemplo de resiliencia en la contracultura oscura es Hoffen, un proyecto independiente de dark y cold wave surgido en 2015. A pesar de los desafíos que enfrentan los artistas alternativos no ligados a sellos comerciales, esta banda se atrinchera en su música underground inspirada en The Cure para explorar temas como la ansiedad laboral y despojo inmobiliario que se vive en el país.

En México la escena oscura nació con los proyectos de Jesús Bojalil, conocido como Capitán Pijamas, y Alex Eisenring, músico de la banda Escuadrón del Ritmo, un par jóvenes que gracias a su creatividad abrieron las puertas a un nuevo género entre el punk, pop y rock.

Otro personaje distinguido fue Mateo Lafontaine, fanático de los sintetizadores, del futurismo, del new wave, post punk y lo industrial. Creó el proyecto musical Década 2 e impulsó a los jóvenes del ambiente underground en México a expresarse a través de estos sonidos.

Entre esos jóvenes se encontraba Dalí Lantzeta quien es creador de Hoffen, uno de los proyectos que ha causado revuelo pues a lo largo de ocho años se ha aferrado al género y ha logrado sacar cuatro discos producidos por ellos.

Hoffen nació cuando Dalí Lantzeta inició un nuevo proyecto como solista ante la necesidad de explorar sonidos y explotar su creatividad sin obstáculos de ningún tipo más que los personales.

Dalí, quien vive una doble vida como publicista y músico de la escena dark, toca y compone junto a su hermano, Sidney quien está a cargo de la guitarra, su pareja Trashnikova que potencia el sonido de la banda con los sintetizadores y su mejor amigo Misha, quien aporta groove a las canciones con un bajo potente, lleno de presencia y ritmo tal como él mismo describió su sonido.

Todos, aunque tienen inspiraciones diversas, confluyen en algo: son fanáticos de The Cure pero también de The Beatles y se consideran a sí mismos como melómanos, por lo que siempre están buscando innovar su sonido con nuevas técnicas y sonidos. Dalí insiste en que si bien tienen una clara influencia en la escena oscura también tiene la intención de experimentar y explica que con inspiración en AC/DC y Led Zeppelin su proyecto tiene guitarrazos poco comunes en el wave.

Trashnikova es la tecladista de Hoffen, una posición central en el sonido dark wave por la importancia que tiene el sintetizador en este género, y ella insiste en que aunque hay espacios para las mujeres músicos en esta escena es importante que quien quiera hacerlo se atreva a hacer música y desarrolle confianza en sí misma.

Y lo explicó como una cadena de efectos en donde si una mujer se atreve a hacerlo y sube a un escenario podría inspirar a otras mujeres a hacer música que después ellas inspirarán a más mujeres, adolescentes y niñas a expresar sus pensamientos y sentimientos a través de la música sin importar el género musical.

Por otro lado, también llamó al público a abrir el panorama de visión pues señaló que existen eventos de la escena dark repletos de mujeres músicos y resaltó la importancia de que los escuchas presten atención a este tipo de iniciativas que buscan darle lugar a las agrupaciones de mujeres.

Aunque Hoffen fue uno de los pocos grupos que no sólo sobrevivió a la pandemia por Covid-19 sino que logró co-producir un disco con uno de los sellos independientes más reconocidos de la escena oscura, Cleopatra Records, un estudio ubicado en Los Ángeles que busca apoyar el talento emergente, la banda insiste en la importancia de conservar su material, por lo que decidieron continuar la producción de su música lejos de cualquier sello.

De acuerdo con Dalí, no sólo se trata de hacer música y hacer contactos, sino que también es necesario tener un concepto bien definido y un trabajo reunido en una misma plataforma para que cuando se presente la oportunidad los artistas puedan dirigir a sus posibles escuchas a un mismo lugar.

La banda no sólo tiene presencia en redes, sino que también plasma su arte en soportes físicos, como CD, vinilos y cassettes. Misha, el bajista, ve esto como un “objeto arte”, buscando revivir el ritual en torno a la música y explica que optaron por estos formatos como un homenaje a sus inicios en la música llenos de recuerdos familiares donde los discos unían a las personas para reflexionar.

Toda su obra está disponible en plataformas de video y audio como Youtube y Spotify, aunque también comercializan discos, vinilos y cassettes a través de su Instagram oficial.

Entre sus canciones destacan “Cold tears of an angel”, el primer sencillo que marcó el inicio de la banda en 2015. Posteriormente, lanzaron su álbum debut homónimo en 2016, exhibiendo las primeras técnicas de grabación de Dalí, que luego perfeccionaron.

El segundo disco, “Blinded”, vio la luz en noviembre de 2019, coincidiendo con el apogeo de su popularidad; no obstante, la pandemia limitó sus actuaciones en vivo. En este material se encuentra la canción “Fragile” descrita por la propia banda como una de las más movidas.

Este álbum anticipó el tercero, “The Unbearable Lightness”, que ganó reconocimiento por sus tributos a grupos clásicos como Caifanes o Shocking Blue. Ahora están inmersos en la creación de su cuarto álbum, “Proteos”.