En dos transacciones diferentes y con ocho años de diferencia entre cada una, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) se abasteció de un lote de 19 ametralladoras descritas por su fabricante como ideales para “suprimir múltiples objetivos en cortos periodos de tiempo”.
Se trata de las mortíferas M134D, producidas y distribuidas por la empresa estadounidense Dillon Aero Inc., ubicada en Scottsdale, Arizona.
A través de una solicitud de información vía Transparencia, Infobae México pudo constatar que la corporación militar ha invertido un millón 803 mil 51 dólares en ametralladoras M134 en los últimos diez años.
La Sedena fue cuestionada sobre el armamento de este tipo adquirido desde 2006, año en que el gobierno de Felipe Calderón declaró un combate frontal a los grupos del crimen organizado y desató la erróneamente llamada “guerra contra el narco”.
Sin embargo, de acuerdo con el documento obtenido por este medio —emitido por las direcciones generales de Administración y de Materiales de Guerra— desde aquel entonces la Sedena sólo ha hecho dos compras de estos artefactos.
La primera ocurrió en 2013, cuando la institución militar adquirió 16 ametralladoras M134 de Dillon Aero Inc. por un precio unitario de 67 mil 596 dólares. Es decir, en ese año se destinó un total de un millón 81 mil 536 dólares para esta operación.
Según datos de la Secretaría de Gobernación (Segob), en 2013 el valor máximo que alcanzó el dólar fue de 13,43 pesos, por lo que la inversión que la Sedena hizo para obtener dichas ametralladoras habría sido de hasta 14 millones 525 mil pesos.
El siguiente pedido de este armamento se realizó en 2021. Aquel año, la Sedena únicamente compró tres ametralladoras, pero para ese entonces el costo por pieza ya se había triplicado.
Para ese año, Dillon Aero Inc. le vendió a la dependencia federal tres ejemplares de M134D por 240 mil 505 dólares cada una, lo que significa que la Sedena gastó un total de 721 mil 515 dólares, equivalentes a cerca de 15 millones 736 mil pesos, según el valor de cambio en tal periodo.
¿Cómo es la potente M134D?
Con una capacidad de disparar hasta tres mil balas por minuto (50 detonaciones por segundo), la M134D es un mortífero aditamento que las Fuerzas Armadas han implementado en operativos de alta relevancia y, por lo general, la llevan montada en helicópteros para realizar feroces incursiones aéreas.
Uno de los episodios en los que esta ametralladora se convirtió en protagonista ocurrió el 9 de febrero de 2017, cuando la Secretaría de Marina (Semar) ejecutó un operativo para capturar a Juan Francisco Patrón Sánchez, alias “El H2″, líder del Cártel de los Beltrán Leyva en Nayarit.
La cortina de fuego que la Semar dejó caer sobre su domicilio acabó con todos los sicarios que pretendían protegerlo. “El H2″ murió en el mismo sitio, luego de que el cuerpo de élite de la Marina entrara al inmueble.
Otro ejemplar de esta letal ametralladora fue utilizado el 5 de enero de 2023 cuando, desde un helicóptero UH-60 Black Hawk, agentes de la Fuerza Aérea la accionaron en la localidad de Jesús María, Culiacán, durante el operativo que permitió la recaptura de Ovidio Guzmán, alias “El Ratón”.
Pese a que esta arma fue diseñada exclusivamente para los ejércitos de los países del Tratado del Atlántico Norte, en la última década ha habido reportes de que varias M134 habrían llegado a manos de grupos criminales como el Cártel del Golfo y el Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG) a través del mercado negro.