La mañana del 22 de agosto, dos personas identificadas como presuntas responsables en las agresiones que causaron la muerte de Kuko, un perrito guía en el municipio de Nicolás Romero, fueron detenidas por agentes de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM).
De acuerdo con información preliminar compartida por el reportero Osvaldo Müller para Telediario, Nadia Elizabeth “N” y Daniel “N” fueron identificados como posibles implicados durante las labores en campo y gabinete, por lo que fueron aprehendidos y trasladados al Centro de Justicia de Tlalnepantla.
Según los reportes iniciales, Nadia Elizabeth “N” y Daniel “N” son esposos y serán ingresados en las próximas horas al Penal de Barrientos. Hasta el momento de la presente edición, la Fiscalía mexiquense no ha emitido un comunicado oficial que detalle las circunstancias en que ambas personas fueron capturadas.
El brutal ataque a Kuko
Kuko era un perrito de raza Akita que se desempeñaba como guía de un adulto mayor con discapacidad visual y auditiva. El pasado 15 de agosto, mientras jugaba con su dueño, se escapó momentáneamente e ingresó al condominio Aguiluchos 13, en el municipio de Nicolás Romero.
De acuerdo con diversos testimonios, Kuko padecía de epilepsia, por lo que había ocasiones en las que aparentaba tener un comportamiento violento, a pesar de ser inofensivo.
Mientras se encontraba en el mencionado fraccionamiento, algunos vecinos pensaron que estaba atacando a una de las residentes del lugar y decidieron amarrarlo y golpearlo en múltiples ocasiones.
El can fue rescatado en un primer momento por algunos policías y voluntarios de la asociación Patitas a la Obra, quienes lo trasladaron de emergencia con un médico veterinario.
Sin embargo, las atenciones no lograron contrarrestar el daño que los vecinos le habían causado por la golpiza y Kuko murió al día siguiente.
Este hecho impulsó una protesta encabezada por defensores de los derechos animales, quienes exigieron justicia para el perrito y pidieron a las autoridades que se aplicara todo el peso de la ley en contra de quienes hayan sido responsables de su muerte.