Un juez de control dictó prisión preventiva justificada por el delito de homicidio a Manuel Alejandro “N”, séptima persona detenida por la muerte del empresario Iñigo Arena Sainz, ocurrida el 6 de agosto al interior del Club Black Royce, ubicado en el municipio de Naucalpan.
De acuerdo con la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM), el juez de control del Distrito Judicial de Tlalnepantla aceptó las pruebas que presentó el agente del Ministerio Público contra Manuel Alejandro “N” quien es acusado de asignar la mesa a Arenas Sainz y persuadir a seguir tomando a pesar de su estado inconveniente.
Además, Manuel Alejandro solicitó al empresario subir a la zona VIP del lugar, donde minutos después el empresario comenzó a sentirse mal.
“El agente del Ministerio Público de la FGJEM aportó datos de prueba y formuló imputación por el delito de homicidio contra este individuo, quien habría participado en la posible comisión del hecho delictuoso”, señaló la autoridad mexiquense en un comunicado.
Por su parte, la defensa de Manuel Alejandro “N” solicitó al juez la duplicidad del término, mismo que le fue otorgado, por lo que no pudo ser vinculado a proceso y su audiencia continuará el próximo martes 22 de agosto a las nueve de la mañana, de acuerdo con la prórroga de plazo constitucional.
Pese a ello, el órgano jurisdiccional estableció como medida cautelar la prisión preventiva justificada, por lo que Manuel Alejandro “N” deberá ser considerado inocente hasta que sea dictada una sentencia condenatoria en su contra.
La Fiscalía del Edomex cumplimentó una orden de aprehensión el jueves 17 de agosto en contra de Manuel Alejandro “N”, mismo que fue detenido en la colonia El Corralito, municipio de Naucalpan, mediante una acción operativa realizada por agentes de la Policía de Investigación.
“Producto de las entrevistas en sede ministerial y evidencia recabada, se precisó que desde el arribo de I.A.S. al establecimiento Black Royce, fue atendido por un mesero a quien se identifica como Manuel Alejandro “N”, quien a pesar del horario y de que la víctima se encontraba en evidente estado inconveniente lo persuadió en conjunto con los individuos (los otros seis detenidos) de continuar ingiriendo bebidas de contenido alcohólico”, precisó el Ministerio Público local.
Las autoridades han identificado a siete personas que presuntamente participaron en el fallecimiento del empresario, todos empleados del lugar, de las cuales Aritzi Abril “N”, Ana Karen “N”, Cecilia “N”, Ana Karen “N N”, Eduardo “N” y Carlos Daniel “N”, actualmente se encuentran vinculadas a proceso.
En la zona VIP, Iñigo Arenas permaneció con las cuatro mujeres aproximadamente 40 minutos. Transcurrido ese tiempo, una mesera dijo al encargado de seguridad, Carlos Daniel “N”, que el empresario se sentía mal y “se puso morado”, por lo que personal del establecimiento “le practicó RCP”.
“Ante esta situación llamaron a los servicios de emergencia y lo trasladaron a otra área del local junto a la salida de emergencia, lugar donde se realizó el levantamiento del cuerpo”, precisó la Fiscalía, quien también refiere que no existe evidencia de que los imputados hubieran alertado de manera oportuna a estos servicios para la atención del empresario. Manuel Alejandro “N” ayudó a bajar el cuerpo del empresario.
El Ministerio Público aseguró que las cuatro mujeres “ordenaron diversas bebidas y aparentemente le suministraron sustancias” al empresario.
La necropsia concluyó que la causa de muerte de Iñigo Arena Sainz fue por asfixia mecánica, “sofocación inducida en su modalidad de oclusión de vías respiratorias por contenido gástrico con presencia de alcohol y de sustancias químicas de naturaleza controlada, que limitaron su conciencia, funciones motoras y que en grado de probabilidad habría propiciado su deceso”.