A lo largo de la historia del boxeo, México ha sido uno de los países que mayor cantidad de exponentes ha catapultado ante el mundo. Uno de los referentes que se posicionaron en el gusto de la afición fue Raúl Macías, quien a pesar de su muerte fue inducido en el Salón de la Fama del Boxeo Latinoamericano.
Este miércoles 16 de agosto, el organismo creado en el año 2022 con sede en Caracas, Venezuela, realizó una ceremonia para recordar y encaminar un homenaje póstumo al Ratón Macías. El acto, de acuerdo con el presidente del organismo, Orlando Bohórquez Parra, fue necesario para recordar la relevancia que el mexicano tuvo en el boxeo.
“Yo pensé en Raúl Ratón Macías, una figura gloriosa y lo planteé con el consejo del Salón y se consideró que era merecedor. El voto fue unánime, nadie puso peros, todos sabemos que el Ratón no sólo era buen boxeador, sino que era muy popular, muy querido, buen padre de familia. Eso también influyó”, señaló el presidente del organismo de acuerdo con el periódico Excélsior.
En el acto estuvieron presentes Yolanda Macías, hija del boxeador, así como su viuda Yolanda Calderón, quien recibió el reconocimiento durante la incorporación de su difunto esposo al Salón de la Fama del Boxeo Latinoamericano, así como la medalla conmemorativa por los 90 años de la Confederación Deportiva Mexicana (Codeme).
Por su parte, el presidente de la Federación Mexicana de Boxeo (FMB), Ricardo Contreras, catalogó al Ratón Macías como el ídolo más grande que ha tenido México debido a su peculiar trayecto en el ámbito del pugilismo.
“Ratón Macías nunca morirá para el pueblo mexicano y es un referente al ser el ídolo más grande que ha dado México, tras cambiar el estereotipo del pugilista nacional”, reconoció durante la ceremonia.
¿Quién fue el “Ratón” Macías?
Raúl Macías fue, quizás, el primer personaje que brilló en el boxeo y puso en el panorama nacional e internacional el talento de los atletas criados al interior de Tepito. Nacido el 28 de julio de 1934, el Ratón creció en uno de los barrios más bravos y trabajadores del Distrito Federal En principio, se dedicó al oficio familiar de zapatero, aunque con el paso de los años se alejó de él.
Antes que él, algunos de sus hermanos mayores practicaron el boxeo. Con dicho impulso, incursionó en la misma disciplina durante su adolescencia y a los 14 años se ganó el mote que caracterizó su legado.
Fue al interior del mítico gimnasio Jordan que su mánager y su entrenador lo pusieron a pelear con un púgil de peso completo en una sesión de sparring. Al notar su tamaño, el joven Macías corrió y se escabulló entre las piernas de su rival para evitar el castigo, actitud que desató la comparación con la conducta de un ratón.
Pese a ello, Macías consolidó una brillante trayectoria como amateur. Su talento lo llevó a representar a México en los Juegos Centroamericanos de Guatemala, donde ganó un bronce, así como los Panamericanos de Argentina y los Olímpicos de Helsinki, donde finalizó en el sexto lugar.
En noviembre de 1952 debutó como profesional y a los 21 años se convirtió en campeón mundial de peso gallo en la Asociación Nacional de Boxeo (ANB), órgano precursor de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB). Fue así que se convirtió en un héroe del deporte nacional, motivo por el fue cobijado por la afición incluso cuando fue noqueado por Billy Peacock.
Con un récord de 41 victorias y un par de derrotas, la noche del 28 de febrero de 1959 puso fin a su carrera. Luego de vencer a Ernesto Parra en la Arena México, comunicó a los 17 mil espectadores que acudieron al recinto deportivo que su decisión estuvo motivada por cumplir una promesa con su madre.