Muy pocos conocían a Rodolfo Vera Calderón hasta el pasado fin de semana cuando se coronó ganador de esta edición de Masterchef Argentina, algunos comentarios criticaron su personalidad firme o que la mayoría de sus recetas fueran de su familia; sin embargo, su esencia mexicana fue el secreto que al final lo llevó a conquistar el paladar de los jurados y levantar el codiciado trofeo.
Actualmente tiene 46 años, nació en Guanajuato, México, pero se enamoró de Argentina y se quedó a radicar desde hace 19 años en Buenos Aires, su ciudad favorita pese a que ha viajado por el mundo desde pequeño gracias a los viajes que cada año sus padres organizaban para reunir a la familia, ya que él y sus hermanas estudiaban en colegios en Estados Unidos.
“Tenía 14 o 15 años, fui en el año 92 con mis papás nos llevan en uno de los viajes en los veranos cuando nos juntábamos toda la familia, pudimos ir a sureste asiático, a un Safari en África, un día mi hermana dijo que quería venir a Sudamérica, así que en 1992 fuimos a Brasil y después llegamos a Argentina. Cuando llegamos a Buenos Aires me acuerdo perfecto que la ciudad me generó algo muy especial, en esa semana dije ‘quiero vivir acá’ me dio como esa sensación, no sabía si en realidad un día me iba a vivir a venir a vivir acá pero yo ahí nació mi deseo”, dijo en exclusiva para Infobae México “Rudy”, como lo llamaban sus compañeros del certamen culinario.
Tuvo que regresar a México para seguir estudiando, hizo la carrera de Relaciones internacionales en el Tec de Monterrey, luego viajó a la Sorbona de París para obtener un certificado de la lengua y donde radicó por un tiempo y donde también aprendió a cocinar platillos franceses, que junto con la comida mexicana se consideran patrimonio de la humanidad.
La segunda vez que vacacionó en Argentina fue gracias a una oferta de avión para estar una semana, lo que volvió a generarle la necesidad de quedarse, pero no pudo porque tenía que seguir estudiando. Después radicó en Washington para ir a la Universidad de Georgetown para una maestría de estudios latinoamericanos. Fue que en un verano le llegó una nueva oportunidad de viajar nuevamente a Buenos Aires por un intercambio, lo cual aceptó de inmediato y se quedó con amigos tres meses, fue ahí donde se decidió a radicar en esta enigmática ciudad que ya no era ajena para él y que tanto le atraía.
Durante su participación en Masterchef Argentina “Rudy” hizo énfasis en demostrar lo que la comida y la cocina significaban para él, más allá de un buen sabor, trató de plasmar lo importante para su familia que eran en sí mismas las reuniones, eran los momentos atesorados para hacer más sólida su unión y estar al tanto de lo que ocurría con cada integrante.
En reiteradas ocasiones en el programa que se transmitió en Telefe, detalló cómo su madre y abuela eran extraordinarias cocineras, pero además en su niñez tomó una formación extra cuando veía preparar la comida a Teresa, la cocinera de su familia que lo ponía a picar cebolla y a realizar otros encargos que le fueron dando esa educación informal que se fue sofisticando y que finalmente demostró en el programa.
Si bien nunca estudió la profesión de chef o repostero sí estudió muchos libros al respecto. Además recordó que en sus viajes por el mundo su madre les inculcaba el probar cualquier tipo de comida local fuera lo que fuera para abrir su mente a nuevos sabores por lo que los llevaba a mercados locales.
“Al principio (del programa Masterchef Argentina) uno va viendo y se da cuenta el panorama de cómo vienen las fortalezas de los otros porque es una competencia. Entonces tienes que empezar a hacer un poco estratega para hasta el final yo me mantuve fiel a lo mío a mi esencia, a las recetas de mi familia, la comida era todo un ritual, Teresa ya es como mi segunda, mamá todo eso junto ha llevado a un concurso y para identificar la esencia de donde crecí y que gustó al jurado”, opinó Rodolfo.
Además de chef, Rodolfo es periodista, trabajó muchos años en una revista de social como editor de la sección de la realeza, incluso sus contactos lo llevaron a entrevistar a diversos personajes de la monarquía en Europa.
Actualmente la editorial Random House lo invitó a escribir su libro de recetas familiares que tanto sorprendieron en el programa televisivo y que marcan la esencia de México y muy en especial de la tradición familiar.
Sin embargo, el también escritor no es un novato, también tiene publicados ya dos libros: “Mi vida con Christina Onassis” junto a Marina Tchomlekdjoglou (2014) y “Máxima, la construcción de una reina” junto a María Paula Galloni (2021).
Para adentrarse en la esencia de la cocina mexicana y argentina el coronado ganador de Masterchef Argentina 2023 recomendó platillos de cada nación según su paladar experto:
Platillos mexicanos que recomienda a los argentinos: en primer lugar tacos al pastor, pescado frito acompañado de nopales con papas cambray y cilantro, pollo con mole y arroz, huitlacoche con flor de calabaza, el pastel de tres leches; y como un extra una receta auténtica y tan extraña como deliciosa, el chile en nogada, la receta que lo hizo ganador
Mientras que los platillos argentinos que recomienda a los mexicanos son: empanadas salteñas fritas, torta balcarce con castañas adentro, un buen asado con una buena parrilla en una buena leña, la humita que es un es un puré de maíz que se hace como relleno para con pastel o empanadas, el pastel de carne también es delicioso, como una especie de picadillo condimentado.