Luego de que el gobierno de Costa Rica y Panamá reportaron sus primeros casos de ganado infestado de gusano barrenador, las autoridades mexicanas han anunciado que reforzarán sus medidas de defensa y vigilancia epidemiológica.
A través de un comunicado emitido el pasado 4 de agosto, la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), a través del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), dio a conocer las medidas que ha tomado el gobierno mexicano para proteger la ganadería nacional días después de que Costa Rica registró un caso en Puntarenas y en Panamá las incidencias también han aumentado.
En primera instancia, se ha ordenado reforzar la inspección zoosanitaria en todos los puertos, aeropuertos y fronteras de ingreso al país, especialmente de aquellas mercancías provenientes de las naciones en donde se han detectado casos.
De igual forma, “se intensificó la inspección de comandas, cocinas, gambuzas y desechos de buques comerciales, cruceros y aviones, con el fin de sellarlos para su retorno al país de origen o garantizar que se destruyan de manera adecuada”.
Cabe apuntar que el Cochliomyia hominivorax, como se le conoce al gusano barrenador de ganado, ha estado ausente en el país desde hace más de 30 años.
Qué es el gusano barrenador
El gusano barrenador del ganado (Cochliomyia hominivorax) es una plaga que existe en el continente americano desde hace siglos, sin embargo, apenas hace unas décadas el avance de la ciencia y la tecnología ha permitido estudiarlo mejor debido a que resulta muy perjudicial para la producción ganadera.
De acuerdo con la Organización Mundial de Sanidad Animal, esta larva afecta no sólo al ganado vacuno, sino también a porcinos, ovinos, equinos, animales silvestres, mascotas e incluso a los seres humanos, revelando un alcance amplio y preocupante.
Originario del Nuevo Mundo, este parásito encontró su nicho principalmente en las regiones de climas cálidos de América y África, pues favorece su reproducción. Estos pequeños insectos, que se asemejan a las abejas, depositan sus huevos en heridas presentes en el ganado.
Las larvas se abren camino a través de la piel del animal y migran hacia sus tejidos internos, incluidos los músculos y órganos. Este proceso puede desencadenar diversos problemas de salud en el ganado como inflamaciones, infecciones y daños en los tejidos hasta llegar a formar agujeros que posteriormente se vuelven focos de infección.
Aunque actualmente no hay vacunas que sean capaces de prevenir la plaga en el ganado, sí se puede optar por la aplicación de insecticidas organofosforados o avermectinas en las heridas infestadas, tanto para matar las larvas como para proporcionar una protección residual contra la reinfestación.
La presencia de este gusano puede afectar drásticamente la producción de carne y leche, causando pérdidas económicas significativas para los ganaderos.
Erradicado en México desde hace 30 años
En 1972 los gobiernos de México y Estados Unidos firmaron un convenio que permitió que ambos países trabajaran de manera conjunta para erradicar este parásito de sus territorios, lo que más tarde llevaría a la creación de la Comisión México-Americana para la Erradicación del Gusano Barrenador del Ganado (COMEXA).
Cuatro años más tarde, en 1976, se puso en operación una planta de cría y esterilización de machos de gusano barrenador en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, permitiendo a los expertos tener un mejor análisis. México logró la erradicación de la plaga de forma oficial en 1991, constituyendo una de las mayores historias de éxito de los sanitaristas mexicanos.
En 2016, la Secretaría de Agricultura donó equipo y material de la planta Comexa al gobierno de Panamá, esto con el objetivo de fortalecer la colaboración con los países de Centroamérica y continuar la lucha de la eliminación del gusano barrenador de ganado.
Actualmente la Sader también cuenta con expertos capaces de identificar este tipo de gusano en sus laboratorios o bien a través de un tele-diagnóstico. De igual forma, da constantes capacitaciones a médicos veterinarios para otorgarles las herramientas que les permitan detectar de manera oportuna esta plaga.