Desde que la más reciente película del cineasta Christopher Nolan llegó a las salas de México el 20 de julio del 2023, el nombre de Oppenheimer está en boca de todos. El filme, que pretende competir directamente con Barbie de Greta Gerwig, está siendo todo un éxito entre los críticos y fanáticos del séptimo arte.
J. Robert Oppenheimer fue un talentoso físico que dirigió el Proyecto Manhattan para inventar la primera bomba nuclear en la historia de la humanidad, con la finalidad de terminar la Segunda Guerra Mundial y ganarle a Hitler y su ejército nazi en una carrera tecnológica enfocada en desarrollo de armas de destrucción masiva.
El invento que Oppenheimer creó junto a su equipo de científicos y asesorado moralmente por importantes nombres en la ciencia como Albert Einstein, fue detonado un 6 de agosto de 1945 sobre las ciudades japonesas de Hiroshima y Nagasaki, desatando un nivel de destrucción sin precedentes.
Pero la historia de Oppenheimer no se limita a Europa y Estados Unidos, pues el físico nuclear también se relacionó con México. Oppie, como le decían sus colaboradores, visitó nuestro país y hasta tuvo un amigo de origen mexicano con el que compartió su pasión por la ciencia y el conocimiento: su nombre era Marcos Moshinsky.
¿Quién fue Marcos Moshinsky?
Fue científico judío nacido el 20 de abril de 1921 en Kiev, Ucrania, ciudad que en ese entonces formaba parte de la Unión Soviética. Cuando cumplió 3 años, sus padres y él llegaron a nuestro país en calidad de refugiados y desde entonces, México se convirtió en su residencia oficial.
Moshinsky se nacionalizó como mexicano en el año 1942, cuando tenían 21 años y luego de finalizar su licenciatura en Física en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Tras convertirse en licenciado, el físico buscó un doctorado en la Universidad de Priceton, institución donde se encontraba Oppenheimer.
El físico contaba que, su profesor Eugene Wigner (Premio Nobel de Física) y él tenían discusiones científicas una vez por semana, y que siempre que tocaba la puerta, figuras importantes como Oppenheimmer, padre de la bomba atómica, salía de la oficina.
Sobre aquella época estudiando en la Universidad de Priceton, Marcos Moshinsky contaba:
“Priceton, en mi época de estudiante graduado, fue quizás el centro más importante de la física teórica del mundo, en parte por haber recibido como refugiados a muchos de los mejores físicos europeos, con científicos como Wigner en la Universidad y Oppenheimer dirigiendo el Institute of Advance Study”.
Alejandro Frank, quien es un físico nuclear también egresado de la Universidad Nacional Autónoma de México cuenta que Marcos Moshinsky tenía una colección de cuadros firmados por físicos de todas partes del mundo, de diferentes grados de importancia y fama.
Entre los “autógrafos” con los que Moshinsky adornaba su casa de Copilco se encontraban los de Eugene Wigner, quien fue su mentor, Richard Feynman, Abdus Salam y, por supuesto, J. Robert Oppenheimer, quien lo había visitado en la Ciudad de México.
En una entrevista, Moshinsky aseguró que conoció a Albert Einstein, pero que el trato que tuvieron fue bastante superficial, pues él era sólo un estudiante graduado mientras que el padre de la relatividad ya era un nombre fuerte entre la comunidad científica.
Sin embargo, sí pudo tener estrechas relaciones con físicos de la talla de Albert Einstein, como Oppenheimmer: “Fui amigo personal, más adelante, ya cuando me recibí y todo, de Robert Oppenheimer”. Marcos Moshinsky falleció el 1 de abril del 2009 en la Ciudad de México.
En 1962, Oppenheimer visitó la capital del país para dar una conferencia llamada Meditaciones sobre la ciencia y la cultura, donde habló de la responsabilidad de la humanidad con el uso de la tecnología. Tal encuentro se dio en el Instituto México-Norteamericano de Relaciones Culturales.