Cuatro integrantes del Cártel de Tijuana fueron condenados a más de 200 años de cárcel por diferentes delitos en el estado de Baja California.
Los imputados fueron identificados como Fabian Pérez Ozuna; José Raúl González Hernández; José Martínez Jr. y/o José Martínez Junior; así como Julio César Alducín Munguía. A estos sujetos se les relaciona como miembros de la organización criminal también conocida como de los Arellano Félix.
De acuerdo con la Fiscalía General de la República (FGR), las cuatro personas fueron encontrados culpables por los delitos de delincuencia organizada en hipótesis de ilícitos contra la salud y secuestro; privación ilegal de la libertad en la modalidad de secuestro; acopio de armas de fuego y posesión de cartuchos, ambos de uso exclusivo y homicidio calificado.
Los integrantes del Cártel de los Arellano Félix fueron detenidos en un inmueble en la colonia Camino Verde, en Tijuana, Baja California, en enero de 2007. Estos sujetos tenían secuestradas a siete personas y se les logró asegurar armas y droga.
En el caso de Fabian Pérez y José Raúl González se les dictó sentencia condenatoria de 223 años ocho meses de prisión y una multa de 64 mil 780 pesos tras la reposición de procedimiento ordenada por la autoridad correspondiente, todo ello, por los ilícitos de delincuencia organizada en hipótesis de delitos contra la salud y secuestro; privación ilegal de la libertad en la modalidad de secuestro; acopio de armas de fuego y posesión de cartuchos, ambos de uso exclusivo del Ejército, Armada y Fuerza Aérea; y homicidio calificado.
En tanto, a José Martínez y Julio César Alducín se les fijó una pena de 203 años ocho meses de prisión y multa de 64 mil 780 pesos, por los mismos delitos, excepto el de homicidio calificado.
Según informó el Ministerio Público de la Federación, los cuatro ya se encuentran recluidos en diferentes centros penitenciarios del país: “Julio César “A”, se encuentra recluido en el Centro Federal de Readaptación Social, número 1 “Altiplano”, José “G”, en el Número 14 “CPS-Durango”; Fabián “P”, en el número 4 “Noroeste”, en Tepic, Nayarit; por último, José “M”, en el número 15 “CPS-Chiapas”.
Lugarteniente del Cártel de Tijuana se declaró culpable en EEUU
El 14 de julio, el Departamento de Justicia de los Estados Unidos informó que Juan Francisco Sillas Rocha, alias El Sillas, lugarteniente del Cártel de Tijuana, se declaró culpable ante un juez de Dakota del Norte.
Este importante integrante de los Arellano Félix, quien desde el 2006 se convirtió en un muy poderoso lugarteniente de la organización luego de que Fernando Sánchez Arellano, alias El Ingeniero, asumiera el poder de la organización tras el arresto de su tío Javier Arellano Félix.
Sillas Rocha también es conocido como El Rueda y fue detenido el 5 de noviembre del 2011 por elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) tras un pequeño enfrentamiento sobre el boulevard Insurgentes de Tijuana. Pese a estar arrestado, el Departamento de Justicia de EEUU mencionó que Juan Francisco Sillas siguió ejerciendo su actividad criminal.
El Rueda, originario del municipio de Culiacán, Sinaloa, era considerado por autoridades mexicanas como “uno de los sujetos más violentos; responsable de un sinnúmero de asesinatos”, todo ello, según la Sedena, bajo el mando directo de El Ingeniero, quien le ordenó mantener desde el año 2008 una intensa pugna con Teodoro García Simental, alias El Teo, del Cártel de Sinaloa, por el control de las actividades delictivas en Tijuana.
A El Sillas se le atribuye el secuestro de tres mujeres, familiares de Ismael El Mayo Zambada, uno de los más poderosos líderes del Cártel de Sinaloa, ocurrido el 25 de septiembre de 2010 en Tijuana. Esto, según las autoridades, en represalia por el plagio y desaparición de su hermana Lizeth Sillas Rocha, perpetrado el 30 de julio de ese mismo año, en Nogales, Sonora.
Sillas Rocha se declaró culpable en EEUU por tres delitos: “conspiración para distribuir una sustancia controlada; continuación de empresa criminal; y conspiración de cometer asesinato de fomento de la continuación de la empresa criminal”.