El nombre de Sara Aldrete ha vuelto a resonar debido al estreno de su docuserie llamada La Narcosatánica. Y es que, durante los años ochenta, esta banda delictiva causó una gran conmoción a nivel internacional debido a los sacrificios humanos y otros rituales que hacían.
Fue así que el estreno del proyecto videográfico disponible en la plataforma de streaming de HBO+ no sólo volvió a reabrir incógnitas sobre este caso, sino que también se develó el testimonio en carne propia de la también conocida Madrina.
Cabe recordar que Sara fue una de las personas más apegadas a Adolfo de Jesús Constanzo, líder de la cédula delictiva que practicaba la religión del Palo Mayombe e iniciaba a sus “aprendices” a este tipo de prácticas.
Cuál es la diferencia entre la Santería y el Palo Mayombe
Aldrete era estudiante de arqueología cuando comenzó a interesarse en temas de religión. Así, tras escarbar un poco en todo este mundo tan complejo se interesó poen estudiar la santería.
No obstante, en sus primeros acercamientos no tuvo mucho éxito, ya que los practicantes de estas creencias eran sumamente reservados. Pero fue hasta que conoció a Adolfo de Jesús que se inmiscuyó de forma irreversible en el tema.
“Hasta el día en que lo conocí a él ya supe de qué se trataba todo esto. En vivo los collares, el caracol, todo, para mí era como: ‘Lo tengo aquí'”, se le escucha decir a Sara durante una entrevista para la serie.
La Madrina explicó que en un inicio, el líder de los Nacosatánicos practicaba más la Santeria, pero poco a poco la situación fue cambiando de rumbo.
“La Santería es una religión que llega de África, Haití, Cuba; es un culto a deidades que tienen nombres africanos y se maneja con sacrificio de animales porque se alimenta a los santos con esa energía. Velas habanos, aguardiente que es con lo que se atiende a los santos”, dijo.
Sara ahondó en las diferencias fundamentales al señalar que la religión se divide en diferentes ramas: la Santería, el palo mayombe el babalawo y el sacerdote.
“Adolfo dejó de hacer muchas cosas de santería para dedicarse al Mayombe, me mostró a Elegguá. Es una deidad que se le conoce como “El abre caminos” y tiene diferentes maneras para que él te ayude y te de lo que le estés pidiendo”, destacó.
Aldrete también ahondó en que, cuando comenzó a adentrarse en el Palo Mayombe había prácticas como los sacrificios a animales que no eran de su gusto.
“Me contó lo que se hacía y yo le decía: ‘no me gusta de que mates animales’ y me decía: ‘No tienes que verlo’”, destacó.
Al recordar cómo funcionaban Los Narcosatánicos y externar cómo fue su ceremonia de “Rayamiento”, Sara añadió:
“Adolfo era el sacerdote supremo, que era el que hacía matanza de animales, alimentaba a los santos. Martín y Omar eran mayordomos que ayudaban a limpiar y mantener todo en orden, a revisar los animales que se van a sacrificar, parte de lo que un Padrino hace por un ahijado es mantenerlo con vida, sanarlo, protegerlo y ver por él y su salud en todo”.