La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) de México reconoció este domingo 9 de julio la decisión del juez David G. Guadarrama en contra del perpetrador del atentado criminal del 3 de agosto de 2019 en El Paso, Texas, el cual derivó en el asesinato de 23 personas, incluyendo nueve mexicanas, y la lesión de otras 23.
Con relación al juicio federal que se sigue en Estados Unidos, Patrick Crusius recibió una sentencia de 90 cadenas perpetuas derivada de los cargos por crímenes de odio luego del tiroteo masivo del 3 de agosto de 2019 en un supermercado de la cadena Walmart en la ciudad fronteriza de El Paso.
Crusius, de 24 años de edad y de ideas supremacistas aún podría enfrentar la pena de muerte debido a la gravedad del crimen perpetrado hace cuatro años, donde las víctimas fueron en su mayoría de origen latino.
En agosto de 2019, el entonces canciller, Marcelo Ebrard Casaubón, confirmó que entre las víctimas y heridos se encontraban personas de origen mexicano.
“Hay mexicanos entre ellos. Día de luto para México y los Estados Unidos”, informó el antiguo titular de la SRE:
Por ello, este día el gobierno mexicano señaló que con esta sentencia se reitera una “clara condena en contra del discurso de odio, la xenofobia, el supremacismo blanco y de cualquier acto de violencia”.
Cuando Crusius fue detenido en el estacionamiento, en el lugar de los hechos, dijo a la policía que su objetivo era matar a “mexicanos”. Mientras algunos debatían sobre la influencia del discurso antimigrante de Donald Trump en sus seguidores, el abogado del tirador negó que Patrick Crusius fuera un supremacista blanco y argumentó problemas mentales en su cliente.
Por su parte, Merrick Garland, fiscal general de los Estados Unidos, expuso a través de un comunicado que “nadie en este país debería tener que vivir con miedo a la violencia alimentada por el odio, que serán atacados por su apariencia o su origen”.
“Qué bueno que esto se acabó. Nada que él pueda decir va a traer a mi hijo de regreso”, expresó Francisco Rodríguez, padre de un adolescente de 15 años asesinado en la masacre, luego de conocerse la sentencia en contra del joven de ideas supremacistas.
Por medio del Consulado General de México en El Paso, se mantendrá el seguimiento al proceso judicial que enfrentará Patrick Crusius ante el estado de Texas, así como a la atención que las víctimas y sus familiares pudieran requerir, señaló la SRE.
El Gobierno de México se pronunció para que este tipo de incidentes no vuelvan a ocurrir, y para denunciar la violencia y el supremacismo blanco, por ello seguirá brindando asistencia y protección consular a todas las personas mexicanas en el exterior, sin importar su condición migratoria.
El objetivo de Patrick Crusius eran personas de origen latino
Crusius era residente de la comunidad de Allen, cerca de Dallas, y condujo más de mil kilómetros hasta El Paso, armado con un rifle automático y casi un millar de municiones, con el objetivo de atacar a personas debido a que creía que la comunidad latina estaba desplazando a la gente blanca en Texas.
Al llegar al supermercado abrió fuego contra un grupo de personas en el estacionamiento, donde mató a 23, además de dejar heridas a otras 22.
Previo al ataque, el joven subió un documento a Internet titulado “La verdad incómoda” en el que afirmó que sus acciones serían “una respuesta a la invasión hispana de Texas”. Aseguró que estaba defendiendo a Estados Unidos ante el “reemplazo cultural y étnico”, un argumento con el que los supremacistas blancos justifican sus agresiones hacia otros grupos.