No era proteína vegetal: descubren más de medio millón de pastillas de fentanilo disfrazadas en Sinaloa

Elementos de la Guardia Nacional (GN) localizaron más de medio millón de pastillas de fentanilo que estaban ocultas en envases que aparentaban ser de proteína vegetal. El aseguramiento se realizó en Sinaloa, estado donde se había dado la supuesta orden de frenar la producción de dicho opioide sintético.

Las acciones se llevaron a cabo en una empresa de mensajería y paquetería ubicada en el municipio de Culiacán, donde los uniformados se encontraban revisando los paquetes que ingresaban y salían del establecimiento, según los informes del sábado 8 de julio.

Con la finalidad de “inhibir el transporte, envío y recepción de sustancias ilícitas”, las autoridades realizaron un rastreo preventivo en las instalaciones. Durante estas labores se escogieron envoltorios de manera aleatoria que eran ofalteados por un binomio canino, el cual se interesó por unas cajas de cartón que indicaban contener suplemento alimenticio.

Ante la conducta del binomio, los agentes de la GN abrieron las seis cajas y localizaron 72 botellas de plástico de una supuesta proteína vegetal. Fue así como procedieron a abrir los envases que en su interior ocultaban pastillas de color azul.

Tras una minuciosa inspección, se confirmó que, en efecto, se trataba de fentanilo. En total se contabilizaron más de 600 mil tabletas, cuyo peso aproximado era de 64 kilos con 200 gramos. Cada caja almacenaba cerca de 12 botellas de la aparente proteína.

Con base en las indagatorias se determinó que este paquete tenía como destino un domicilio en la ciudad fronteriza de Tijuana, Baja California. De esa manera, la droga quedó a disposición de la Agencia del Ministerio Público en la entidad para continuar con las investigaciones correspondientes.

Tijuana es uno de los principales muncipios a donde se envían las pastillas de fentanilo que posteriormente son distribuidas en Estados Unidos (EEUU), país que enfrenta una crisis de salud pública por los altos niveles de consumo de este tipo de opioide.

En tanto, el municipio de Culiacán es el principal bastión del Cártel de Sinaloa, organización criminal que ha sido identificada como una de las mayores productoras de fentanilo. Las autoridades estadounidenses responsabilizan específicamente a la facción de Los Chapitos -liderada por los hijos de Joaquín El Chapo Guzmán- por el tráfico de esta droga sintética.

A mediados de junio se dio a conocer que Los Chapitos supuestamente ordenaron frenar la producción de fentanilo en Culiacán, debido a los cargos que el Departamento de Justicia de EEUU ha realizado en contra de los líderes del Cártel de Sinaloa, entre ellos los hijos de El Chapo, acusado de tráfico de drogas sintéticas. En caso de no atenerse a las órdenes, se advirtió que habrían graves consecuencias.

“Se nos dijo que no cocináramos porque si lo hacíamos, nos iba ir muy mal. Por eso ahorita nadie está haciendo fentanilo, todo está parado”, señaló un “cocinero” local al diario Ríodoce.

Lo cierto es que pese a estas advertencias, en el estado de Sinaloa se siguen registrando aseguramientos de fentanilo, lo que indicaría que los grupos criminales aún fabrican esta droga en laboratorios clandestinos.

Esta no es la primera ocasión en que Los Chapitos han buscado deslindarse del tráfico de fentanilo. En el mes de mayo se difundió una carta atribuida a Iván Guzmán Salazar, Alfredo Guzmán Salazar y Joaquín Guzmán López, en la que aseguraban nunca trabajar con dicho opioide.

“Nosotros jamás hemos establecido, a sabiendas, relaciones con personas que trafican fentanilo”, indicaron los hijos del ex líder del Cártel de Sinaloa. Pese a ello, la Administración de Control de Droga (DEA, por sus siglas en inglés) los identifica como los principales productores de fentanilo en México.