¿Terroristas colombianos? Quiénes pudieron estar detrás del atentado con coche bomba en Guanajuato

Una semana después del cobarde ataque contra los oficiales, uno de los responsables ha sido detenido y se ha señalado al Cártel de Santa Rosa Lima (CSRL) como el orquestador del atentado

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Detrás del ataque pudieron estar mercenarios contratados específicamente para eliminar policías (Foto: Twitter@Adela_Micha)
Detrás del ataque pudieron estar mercenarios contratados específicamente para eliminar policías (Foto: Twitter@Adela_Micha)

Varios elementos de la Guardia Nacional resultaron gravemente heridos y uno de ellos murió por la explosón de un automóvil cargado de explosivos en el estado de Guanajuato, uno de los más golpeados por la violencia del crimen organizado, el pasado jueves 29 de junio.

Una semana después del cobarde ataque contra los oficiales, uno de los responsables ha sido detenido y se ha señalado al Cártel de Santa Rosa Lima (CSRL) como el orquestador del atentado. Una versión no confirmada por las autoridades señaló que el objetivo original del ataque eran policías municipales, no guardias nacionales, pero éstos fueron los afectados por atender el falso reporte de varios cuerpos al interior de un automóvil abandonado.

Sin embargo, fuentes de inteligencia consultadas por el periodista Luis Cárdenas evidenciaron una nueva posibilidad sobre quiénes pudieron estar detrás y las violentas implicaciones que esto tendría.

Como contexto, primero se remontó varios atrás para señalar la caída en 2020 del líder del CSRL, José Antonio Yépez Ortiz, alias “El Marro”, que lejos de apaciguar la violencia en Guanajuato la terminó agravando.

Desde la caía de su líder, el CSRL, lejos de disolverse se ha ido fortaleciéndo. Incluso se ha hablado de una posible aliazna con el Cártel del Golfo. Pero más aún, se ha dicho que desde hace un tempo ha empezado a contratar mercenarios colombianos con alto adiestramiento militar para efectuar ataques específicos contra las policías municipales del estado.

Con la desintegración de la Policía Federal a manos del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), muchos de sus elementos terminaron en las filas de la policía de los gobiernos de la oposición. Uno de ellos fue Guanajuato, donde tanto a nivel estatal como municipal operan agentes con entrenamiento de primer nivel que han servido para llevar a cabo operaciones criminales de alto riesgo.

Varios elementos resultaron heridos por la explosión, y uno de ellos murió (Twitter/@AGORAgto)
Varios elementos resultaron heridos por la explosión, y uno de ellos murió (Twitter/@AGORAgto)

Se les conoce como “fedepales”, un juego de palabras entre “federales” y “municipales”. Uno de los eventos más sangrientos en el que estuvieron involucrados los “fepales” se registró el pasado 20 de noviembre, cuando siete de ellos se enfrentaron a tiros con presuntos narcotraficantes del CSRL, luego de un ataque a la comandancia de la Policía Municipal de Celaya en la comunidad San Juan de la Vega.

La comandancia fue atacada en un primer momento con granadas de fragmentación. A los agentes atacados les llamó la atención el nivel de sofisticación y preparación de los sicarios, algo que no habían visto muy a menudo en Guanajuato.

La persecución culminó en un domicilio de la colonia Benito Juárez, y el saldo fue de ocho posibles narcos del CSRL abatidos a tiros. Entre ellos, sin embargo, se pudo identificar a dos hombres de nacionalidad colombiana con fuertes credenciales en tácticas militares.

Uno de ellos fue identificado como Jarinton Jesús López Sarmiento, exmiembro de las Fuerzas Especiales de Colombia con experiencia en Medio Oriente. El otro, identificado como Geovanny Ferrer Estrada, también contaba con entrenamiento paramilitar especializado.

Lo poco que han descubierto las autoridades sobre este fenómenos es cómo llegan estos mercenarios especializados a tierras mexicanas: lo hacen de manera ilegal a través de Cancún, desde donde son trasladado a Chiapas y de ahí a Guanajuato y otros estados donde operen ex agentes de la Policía Federal.

Se trata de hombres altamente especializados en el manejo de armas de alto poder y explosivos. Su misión es consica y clara: elminar a los fedepales.

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