“Somos más los buenos”, fueron las palabras con las que el periodista Carlos Jiménez agradeció el cariño y las muestras de solidaridad tras hacer públicas las amenazas de muerte en su contra por un grupo de hombres armados.
Aunque no se identificaron con un grupo criminal, los sujetos lanzaron violentas advertencias a “C4″ Jiménez por su labor periodística a través de un video, aunque también recibió un audio y una llamada telefónica en el mismo tono.
“Pon mucha atención, sabemos dónde vives, dónde trabajas, dónde entrenas, dónde comes, dónde vive tu familia, en qué vehículos y en qué motocicletas te mueves, no hay lugar donde te puedas esconder de nosotros”, vociferan los sujetos armados en el metraje de escasos 30 segundos.
“C4″, especialista en nota roja
En respuesta, el reportero aseguró que las agresiones en su contra no frenarán su labor periodística y se comprometió a “seguir exhibiendo los rostros de los delincuentes”.
“Somos más los buenos. Merecemos el país sin este tipo de lacras y mugrosos malvivientes”, atajó. “Mi labor es mantenerlo informado y lo seguiré haciendo”, sentenció.
Ante la relevancia del caso, el Presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó que Carlos Jiménez a cuenta con protección otorgadas por el Gobierno Federal, entre ellas un automóvil blindado.
Especializado en nota roja, el periodista Carlos Jiménez es conocido por conducir el programa C4 en Alerta, al aire de lunes a viernes en el canal 6, a partir de las 18:30 horas.
Así fue la primera cobertura del periodista
En entrevista para el programa SNSerio, el comunicador recordó sus inicios en el periodismo cuando, durante la administración del expresidente Vicente Fox, se encargó de cubrir una violenta manifestación en San Salvador Atenco, Estado de México.
En octubre de 2001, Fox Quesada planteó trasladar el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) a terrenos ubicados en la región oriente de la entidad mexiquense, en los municipios de Texcoco, San Salvador Atenco y Chimalhuacán.
Sin consultar a los campesinos, el expresidente panista decretó la expropiación de más de 5 mil hectáreas de tierra; sin embargo, lo que detonó la rabia entre la población fueron las indemnizaciones de tan sólo 7 pesos por metro cuadrado.
Casi un año después, en 6 de agosto de 2002, a través del Diario Oficial de la Federación (DOF) se dio a conocer el decreto mediante el cual el Gobierno Federal canceló el proyecto de construir la terminal aérea en la zona de Texcoco.
Sobre los hechos, Carlos Jiménez recordó el bloqueo de la carretera Texcoco-Lechería y el secuestro de pipas de gas licuado de petróleo por parte de pobladores de San Salvador Atenco, quienes amenazaron con hacerlas estallar en medio del arroyo vehicular.
“Un desastre total. Eran las seis de la tarde, estaba lloviendo y de la redacción hasta allá eran dos horas cuando menos. Todos los reporteros, entre el tráfico y la lluvia, decían ‘yo no quiero ir, yo no quiero ir, que vaya Carlos”, rememoró.
“Esto es lo mío”, afirmó a raíz de esa cobertura, por la que comenzó a retomar casos de “conflictos” y golpes” y que lo ha llevado a especializarse en en temas policiacos.
En aquel entonces, comentó, era complicado realizar enlaces a distancia y actualizar los hechos en tiempo real debido a las limitaciones tecnológicas, contrario a lo que sucede actualmente.
“Ahora lo cuento con mucho orgullo, en aquel entonces sí era complicado y ahora estas cosas [señalando a su teléfono celular] te facilitan todo, tomas una foto y en dos segundos ya está en tu redacción. En aquel entonces tenía que tomar las fotos y regrésate porque había que revelarlas, eran con cámara, con película”, explicó “C4″ Jiménez.
El origen de “C4″, la marca personal de Carlos Jiménez
El origen del apodo “C4″, según cuenta Carlos Jiménez, se remonta a cuando quería crear cuenta de Twitter y, al momento de escoger un nombre de usuario, recordó que su abuela constantemente señalaba la poca paciencia del periodista.
“Mira, yo me dediqué a cubrir policiaco mucho tiempo. Cuando nace Twitter iba a crear yo una cuenta. Mi abuelita siempre me decía que yo explotaba muy fácil, que era una chispita y que de todo me enojaba”, relató.
Debido a su trayectoria como reportero en la televisión y diarios como La Crónica o La Razón de México, Carlos Jiménez sabía de un tipo de explosivo conocido como C-4 que, de acuerdo con el portal military.com, suele utilizarse en operaciones bélicas y en tareas de demolición.
Debido a los comentarios de su abuela, el periodista relacionó el explosivo con su personalidad y terminó por juntarlo con nombre su apellido para identificarse en Twitter.
“Me gustó. En mi Twitter cada vez que tenía alguna nota, algún video, alguna información, empecé a sellar las cosas. Entonces ya decían ‘es que lo subió C4, es que lo trae C4′. A partir de ahí ya decidí ser C4 y a partir de ahí hicimos todo un concepto de C4″, concluyó el comunicador.