Tesoros prehispánicos revelados en la zona arqueológica escondida de Tlalnepantla

La Zona Arqueológica de Santa Cecilia Acatitlán se encuentra en la localidad de Tlalnepantla de Baz, en el Estado de México, se trata de un sitio de gran importancia para la reconstrucción de la historia prehispánica del país, ya que se encontraron vestigios que revelaron más detalles sobre el antiguo modo de vida en la zona lacustre del Valle de México.

Según el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) el nombre Acatitlán significa “en el lugar de los carrizos” , una especie de caña, en lengua náhuatl. En la época prehispánica, este asentamiento se encontraba en la orilla noroeste del gran Lago de Texcoco.

Se cree que este lugar estaba asociado con Tenayuca, el centro político y religioso de la época, y que los dos sitios estaban a unos 3 km de distancia. Más tarde fue anexado por los mexicas y se convirtió en parte de la cultura lacustre del Valle bajo el dominio de Tenochtitlan, hasta la llegada de los conquistadores en 1521.

Lo más destacado de las ruinas arqueológicas es el templo principal que corona el basamento piramidal central, que es diferente a la mayoría de las zonas arqueológicas. Además, el sitio cuenta con una serie de estructuras arquitectónicas, como patios, plazas, escalinatas y muros.

También se han encontrado restos de objetos de cerámica, piedra y obsidiana que proporcionan más información sobre la actividad artesanal.

El sitio arqueológico de Santa Cecilia Acatitlán cuenta con un museo que exhibe una colección de piezas prehispánicas encontradas en el lugar, así como una cocina y una sala de estar en el estilo de la época anterior a la Revolución Mexicana.

El sitio se encuentra en la Calle Circuito Pirámide en Tlalnepantla. Desde la ciudad de México se puede llegar desde la calzada Vallejo o desde eje Central hasta Tenayuca.

Puedes tomar la avenida Santa Cecilia-San Rafael hasta el pueblo de Santa Cecilia. O bien por la vialidad Jesús Reyes Heroles, tomar la avenida Santa Cecilia-San Rafael. En transporte público se puede acceder por la línea 3 del Metrobús que corre de Lindavista a Tenayuca.

Abre sus puertas al público de martes a domingo de 10 h a 17 h y tiene un costo: $70 pesos.

Según el INAH, las fuentes históricas prehispánicas no mencionan el sitio de Santa Cecilia Acatitlán, por lo que se cree que el lugar fue abandonado mucho antes de la llegada de los españoles.

Los orígenes de las ahora ruinas se remontan al año de 1200 d. c., con la llegada de grupos chichimecas que venían peregrinando del norte. Según los antropólogos del INAH, se mezclaron con sobrevivientes de la cultura tolteca y en un ejemplo de sincretismo, adquirieron conocimientos en astronomía, arquitectura, agricultura, escritura, entre otros.

Encabezados por Xólotl llegaron hasta los actuales estados de Tlaxcala, Puebla, Morelos y Estado de México y a través de alianzas o de la guerra con otros pueblos del Valle de México y Texcoco, extendieron su influencia y poder.

Durante ese periodo de expansión, los chichimecas crearon el asentamiento de Santa Cecilia. Además, la cercanía con las orillas del lago les proveía de anfibios y peces para el consumo, así como aves.

Por otro lado, la explotación de la sal fue otra actividad económica que sostuvo este asentamiento.

La Zona Arqueológica de Santa Cecilia Acatitlán es un lugar que resulta de gran interés para aquellos estudiosos o curiosos de la historia prehispánica de México. Además, el sitio es un testimonio de la rica cultura que existió en la zona lacustre del Valle antes de la llegada de los conquistadores españoles.