A casi cuatro años de que María Elena Ríos sufriera un ataque con ácido, este lunes 26 de junio dio inicio la audiencia intermedia en contra de Juan Antonio Vera Carrizal, presunto responsable por el delito de feminicidio en grado de tentativa.
A través de un video compartido en sus redes sociales, la también saxofonista dio a conocer que a las 10:00 de la mañana se llevó a cabo la audiencia por la causa penal 533, por lo que pidió al Tribunal del Poder Judical del Estado de Oaxaca no revictimizarla y no dejarse “manipular” por la defensa del acusado.
“Han pasado casi cuatro años y esta audiencia representa justo la mitad del proceso que aún me falta por caminar. El Tribunal deberá admitir los medios de prueba en base al juicio oral. No debe revictimizarme con pruebas ajenas al hecho”, expresó la joven de 31 años.
En ese sentido, María Elena indicó que durante ese tiempo cada día ha sido un esfuerzo, pues en varias ocasiones ha sufrido atentados en contra de su vida. “Es mi derecho que se me permita mi participación como víctima sin revictimización y sin vejación”, agregó.
En el video que María Elena Ríos subió a su cuenta de Twitter recordó que fue el 9 de septiembre de 2019 cuando Juan Antonio Vera Carrizal la intentó matar con ácido sulfúrico. En estos hechos participaron otras cuatro personas, incluido el hijo del ahora acusado, Juan Antonio Vera Hernández, quien actualmente se encuentra prófugo de la justicia.
La reacción química le provocó quemaduras en el 70% de su cuerpo, por lo que tuvo que someterse a múltiples cirguías para salvaguardar su integridad. Tras haber sobrevivido al ataque, buscó justicia por lo ocurrido y emprendió una lucha por la defensa de sus derechos.
Cabe mencionar que María Elena -originaria de Santo Domingo Tonalá, Oaxaca- sostuvo una relación con Vera Carrizal, quien además de ser empresario fue diputado del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en dicha entidad. Tras su separación la también activista sufrió la agresión con el ácido.
“No hay palabras para describir lo que sentí. Es la violencia más extrema que le pueden ejectuar a una mujer. Mis cicatrices son de tercer grado: las quemaduras carcomieron parte de mis músculos”, comentó posteriormente la joven ante la gaceta de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), donde realizó sus estudios de nivel superior.
El caso de la saxofonista oaxaqueña cobró tal relevancia que ayudó a promover la “Ley Malena”, con el objetivo de castigar la violencia contra las mujeres, específicamente que los ataques con ácido sean calificados como tentativa de feminicidio. Actulamente se busca que la ley se aplique en todas las entidades y niveles de gobierno.
Por su parte, Vera Carrizal ha permanecido preso en el penal de Tanivet, en Oaxaca, desde abril de 2020. Desde ese entonces, el presunto autor intelectual del intento de feminicidio ha buscado ampararse para anular su vinculación a proceso, mientras su defensa intenta que se reclasifique el delito a lesiones.
Cabe recordar que en enero del año en curso, el juez Teódulo Pacheco otorgó a Vera Carrizal la medida cautelar de prisión domiciliaria, por lo que podía enfrentar su proceso desde casa. Sin embargo, una jueza local apeló dicha decisión y ordenó que permaneciera en prisión preventiva.
En la audiencia virutal del pasado 9 de junio, Maria Elena acusó que el juez no le otorgó el uso de la palabra a ella ni a su abogoda Diana Cristal González, además de las tuvieron “muteadas todo el tiempo”.
En cuanto a Juan Antonio Vera Hernández, las autoridades de Oaxaca ofrecen una recompensa de hasta un millón de pesos a cambio de información que lleve a su paradero o detención.