La novedad en transporte es un automóvil eléctrico de dimensiones pequeñas y amable con el ambiente: el Chang Li S1 Pro. Las características de este producto de origen chino han llamado la atención de los usuarios en redes sociales, los consumidores y las autoridades en comercio de vehículos. Con un panorama de aceptación amplio entre la mayoría, aún tendrá que enfrentarse a las restricciones del mercado mexicano.
El vehículo también ha llamado la atención por su precio accesible: 20 mil pesos, aunque en sitios como Mercado Libre y AliExpress está ofertado entre 55 mil y 58 mil más los costos de envío. La oferta parece una opción viable frente al costo promedio de un automóvil en el mercado, que cuadruplica el valor del carro chino cuya popularidad aumenta con los días.
Pese a las legislaciones mexicanas sobre los estándares que deben cumplir los autos para comerciar, en algunos estados como Nuevo León, Tamaulipas e Hidalgo han visto a estos coches circular por las calles de forma libre. Sin embargo, los requisitos de seguridad e importación frenan el comercio del Chang Li S1 Pro para los mexicanos que estaban interesados en adquirirlos.
Las leyes que detuvieron al Chang Li S1 Pro
El Chang Li S1 Pro se ha convertido en el auto eléctrico más accesible del mercado internacional, pero en México poco importan sus beneficios hacia el ambiente si entre sus funciones se pierde la seguridad para los conductores y en su estructura se omite la mano de obra mexicana que ha ganado relevancia en los últimos años, pues esta industria nacional es una de las que más producen vehículos a nivel nacional, según el gobierno.
El primer problema que tiene el pequeño vehículo se liga a la norma NOM-194-SE-2021. Esta legislación, que se implementara desde el 2024, establece una serie requisitos de seguridad a cumplir para cualquier automóvil que aspire a conquistar las carreteras y el mercado nacional: sistema de frenado, bolsas de aire, sistema antibloqueos para frenos, cinturones de tres puntos, seguros en las puertas para evitar que los niños las abran y control electrónico de estabilidad.
Además, la velocidad máxima del Chang Li S1 Pro es de 30 kilómetros por hora. Lo anterior representa otro obstáculo por en México, los carros que alcancen 50 km/h pueden circular en avenidas terciarias. En las vías principales, se exige un desplazamiento veloz que aumenta la velocidad mínima a 70 km/h, según la Ley de Tránsito que sigue vigente hasta la actualidad.
Los riesgos que el Chang Li S1 Pro tiene debido a sus limitaciones hacen que sea ilegal en México. También existe un impedimento más, pero esta vez surge desde la Ley automotriz. Jaime Salazar, director de la 26 edición Expo Eléctrica Internacional 2023 que se realizará el 6 de junio, explicó durante el anuncio de este evento que ni siquiera el costo es un beneficio para la economía mexicana, pues todavía se tendrán que fijar los precios logísticos y de importación.
También mencionó que la Ley Industrial Automotriz estipula que cualquier vehículo de combustión o eléctrico debe contar con alguna parte de fabricación mexicana. En tanto que, el Chang Li S1 sea de armado chino en su totalidad, en México tampoco podrá ser legal para la importación que marcan las normativas.
Las características del Chang Li S1 Pro
El fabricante automotriz de este automóvil es Changzhou Xili Car Industry, empresa dedicada a la producción de vehículos pequeños. El nuevo Chang Li S1 Pro tiene dimensiones ínfimas en comparación con los carros convencionales porque en su interior solo caben tres personas sin forzar para la que fue hecho.
La batería que necesita para funcionar es de 60 voltios y el cargador se incluye en la compra. El lapso de carga completa puede variar entre las 4 y 8 horas, según el mismo fabricante. Respecto al sistema de frenado, solo se mencionan discos de freno en los dos ejes, lo que está por debajo de las especificaciones prevista por la norma NOM-194-SE-2021, que incluye bolsas de aire y cinturones de seguridad.