Siete personas desaparecieron en Zapopan, Jalisco, los casos están ligados a un call center que operaba en dicha región, mismo que se ha convertido en el eje de las investigaciones.
Se trata de los hermanos Itzel Abigail y Carlos David, así como Carlos Benjamín, Jesús Alfredo, Mayra Karina, Jorge Miguel y Arturo Robles Corona, quienes fueron reportados como desaparecidos de manera paulatina desde el 20 de mayo.
Lo revelado por las autoridades en los últimos días ha dejado más interrogantes sobre el caso: marihuana, una mancha de sangre y números telefónicos hallados en el call center fueron las primeras pistas presentadas.
A ello se sumó lo declarado por la titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), Rosa Icela Rodriguez, quien aseguró que entre los indicios se encontró que las siete víctimas estarían relacionadas con “algún tipo de fraudes inmobiliarios y algún tipo de extorsiones telefónicas”.
“Esa es una historia que no deseas que nadie viva”
Para la familia de Arturo Robles, la noticia cayó como un balde de agua fría, según explicó Lety, prima del joven de 30 años a Infobae México.
“Nosotros somos ajenos. Desconocemos totalmente esa parte de la historia. Nosotros lo que pedimos es que aparezcan nuestros desaparecidos que estén de regreso que nos ayuden a encontrarlos”, explicó.
En este sentido expresó su preocupación por lo señalado desde Palacio Nacional la mañana del 30 de mayo:
“De alguna forma al darle vuelta a la historia los hacen parecer como si ellos fueran parte de algo malo cuando la línea de investigación es otra y aparte de eso, pues hay que darle la importancia que ellos tienen como víctimas y desaparecidos”, atajó.
La mujer también explicó que la hermana de Arturo ha señalado que las autoridades no han brindado detalles que expliquen las acusaciones, asimismo recalcó que la línea de investigación preliminar que se les notificó fue fraude telefónico.
Lety se encontraba en la Ciudad de México cuando se enteró de que su primo, Arturo Robles Corona, es una de las siete personas desaparecidas en un call center de Zapopan. Dos días después de enterarse llegó a la entidad, en donde se sumó a las labores de las y los familiares que exigen la localización de los jóvenes.
“Esa una historia que no deseas que nadie viva y desafortunadamente esta historia de desaparecidos sigue creciendo, han sido afectadas muchas familias, entonces cuando me entero de la desaparición, sí fue llorar y pedirle mucho a Dios que nos concediera la dicha de verlo de regreso”, comentó a este medio.
Al respecto reiteró que no se puede normalizar que alguien desaparezca, en ninguna circunstancia: “Eso no puede ser ni es normal en ningún sentido, por eso han alzado la voz los familiares y la ciudadanía”, concluyó.
El caso, entre líneas de investigación y protestas
El 28 de mayo, la Fiscalía del Estado de Jalisco (FGE) dio a conocer la existencia de más de una línea de investigación abierta. El fiscal general, Luis Joaquín Méndez Ruiz, informó el pasado viernes que en el call center se ofrecían “tiempos compartidos” a extranjeros.
Respecto al caso, se dio a conocer que al menos tres de las siete personas desaparecidas fueron privadas de su libertad por hombres armados.
“Tenemos algunas versiones por parte de algunas personas que sí refieren la participación de sujetos armados en varios vehículos con un despliegue similar y con todas las características del crimen organizado. Por lo menos en dos o tres de los desaparecidos sí se dan con la modalidad”, sentenció.
En este sentido, las familias de las siete personas desaparecidas se han mantenido realizando movilizaciones para exigir que se aceleren las investigaciones. Actualmente, tras una mesa de diálogo con la Fiscalía, los familiares cuentan con protección por parte de las autoridades.
A pesar de ello, la hermana del joven desaparecido mencionó que las siete familias recibieron información diferente por parte de las autoridades, pues al principio se estableció que la línea de investigación era fraude telefónico, después se reveló la información sobre la supuesta relación con el crimen organizado.
“Cuando sale la noticia del crimen organizado y el tema de drogas se contrapone totalmente con lo que de primera mano nos debe brindar la autoridad, que nos está brindando muy poca información. La intención de hacernos escuchar es encontrar a mi hermano, lejos de esta situación de delitos o de marco legal que tenga”, explicó a este medio Beatriz Robles Nuevo, la hermana de Arturo.
Es importante mencionar que los allegados a las personas desaparecidas mencionaron que su prioridad es localizarles, por lo que consideran revictimizante el hecho de que se les criminalice por los nuevos datos en torno a la desaparición. La hermana del joven mencionó que tanto ella como los familiares de las otras seis personas desaparecidas son víctimas indirectas de este hecho, por lo que considera que a los siete jóvenes incluso se les ha deshumanizado, así lo explicó Beatriz Robles:
“No sabemos dónde está mi hermano después de ocho días y se le criminaliza, se le trata como delincuente cuando él es una víctima y sentimos como familia que se empieza a perder de vista el objetivo principal que es encontrarlo”
Quién es Arturo Robles Corona
El joven de 30 años tiene formación profesional en la carrera de Arquitectura, estudió en la Facultad de Estudios Superiores (FES) plantel Acatlán de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). La mayor parte de su familia se dedica a distintos oficios, de acuerdo con su hermana.
“Es un chico de familia, nosotros venimos de una familia que hacemos oficios. ¿Qué te puedo decir de mi hermano? Me considero la hermana más apegada a Arturo, es un chico sensible que tiene muchas aspiraciones, un chico completamente introvertido. Arturo es muy hacia adentro”, explicó respecto a su personalidad.
Arturo comenzó a trabajar en ese call center en marzo, aproximadamente. El día que desapareció tuvo comunicación con su familia y con su pareja, a quien le avisó que había llegado a su sitio de trabajo temprano.
“Sé que se presentó a su trabajo el 22 (de mayo) y le hizo llegar a su pareja un audio en el que le hizo saber que había llegado antes, que desayunó a las 7:44, el último mensaje que le llegó de nuestra parte fue a las 8:04, aunque no lo vio, si lo recibió”, dijo su hermana, quien actualmente funge como vocera de las familias, pues en el camino de encontrar a su hermano, descubrió que había más personas siendo buscadas.
A pregunta expresa sobre cualquier indicio que el joven podría haber presentado, su hermana mencionó lo siguiente: “Lo único que sabíamos como familia es que trabajaba en un call center bilingüe de tiempos compartidos, no tenemos información adicional. Siempre ha sido muy hermético”, dijo.
Sobre el momento más reciente en que vio personalmente a Arturo, la joven externó lo siguiente: “Yo lo vi personalmente el domingo 21, estuvimos mis hermanos, mi papá y toda mi familia, fuimos a un tianguis muy conocido en Guadalajara que se llama El Baratillo, me acompañó a cambiar unos tenis que había comprado en la talla equivocada y me regaló unos lentes que utiliza en las manifestaciones”.