“Ya tenemos garantizado todo el derecho de vía y ese es el coraje”, AMLO acusó campaña en contra por expropiaciones

Luego de las críticas que recibió su administración por la toma del tramo de vías de 128 kilómetros concesionadas a Ferrosur, el presidente Andrés Manuel López Obrador acusó una campaña negativa contra él y aseguró que el verdadero objetivo de la oposición es frenar grandes obras como el Tren Maya, del que aseguró el gobierno federal ya tiene todo el derecho de vía.

Dijo que actualmente no se han llevado a cabo expropiaciones, y que las que se han realizado son concertadas. Reiteró que se trata de un rescate, pues se trata de un bien público.

En el contexto por la polémica de los días recientes por las diferencias con Grupo México, el presidente afirmó que no está en contra de los empresarios, sino de los traficantes de influencia y de la corrupción.

Habló sobre las expropiaciones que se realizaron para la ampliación del Tren que conectará con el AIFA. Sobre ello, aseguró que se ha hablado con campesinos y se lograron acuerdos,

En el caso del Tren Maya, recordó que quienes han promovido los amparos son los empresarios, y no los campesinos o ejidatarios.

El Ejecutivo federal recordó que durante la pandemia los grandes empresarios lo consultaron para que se solicitara deuda y apoyarlos. En cambio, dijo, no se contrató deuda y se decidió apoyar “a los de abajo”.

Al ser cuestionado sobre el tema de Tamaulipas, el político tabasqueño sostuvo que “el que nada debe nada teme”, ante la preocupación de pobladores que viven cerca de aduanas y la posibilidad de que se expropie una para seguir con obras.

El presidente afirmó que no está en contra de los empresarios, sino de los traficantes de influencia y de la corrupción, motivos por los que su administración ha tomado decisiones para recuperar bienes de interés público.

El ejecutivo federal acusó que ha habido traficantes de influencias cercanos al poder. En ese sentido expuso que hay quienes hicieron compromisos de subordinación política en el sexenio de Carlos Salinas de Gortari. De acuerdo con el mandatario, creó un grupo compacto, que fue una nueva oligarquía, con los bienes del pueblo, y que fue en este momento cuando entregaron bancos, minas y otros bienes.

Para justificar las políticas de su gobierno, el presidente López Obrador recordó el libro “Desincorporación de entidades paraestatales”, el cual habla de la entrega de empresas del Estado, durante los sexenios anteriores, a compañías privadas.

Habló sobre el caso de Banamex y de Telmex, y afirmó que ha habido un saqueo que si se compara con el de la época colonial, aquello no fue nada en comparación con lo ocurrido en años recientes.

“Crearon una banda, una pandilla. Una banda de saqueadores, pero no sólo se apoderaron de los bienes del pueblo y de la nación. Se apoderaron del Congreso; todas las reformas de la época neoliberal fueron para favorecer el saqueo”, apuntó.

Cabe recordar que este miércoles, el presidente López Obrador descartó que el eventual acuerdo con Grupo México por el tramo de Ferrosur vaya a ser con una compensación en dinero, sino con una reestructura de concesiones, es decir, ampliar al empresario Germán Larrea aquellas que estén por caducar.

Esta semana el diario estadounidense The Wall Street Journal advirtió por los riesgos a la democracia que se enfrentan en México, principalmente luego de que el presidente López Obrador lanzó una serie de ataques a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) por la invalidez de decretos que protegieron sus grandes obras.

A lo que sumó el riesgo para los derechos de los inversionistas, luego de que expropió, también a través de un decreto, tramos de vías concesionados a la empresa Ferrosur, por convenir a sus fines políticos e ignorando la ley.