Andrea Legarreta y Erik Rubín están envueltos en controversia una vez más, pero no por su reciente rompimiento amoroso, sino por un proceso legal que una famosa agrupación mexicana estaría a punto de comenzar en su contra y de su primogénita Mía. Se trata nada más ni nada menos que de La Sonora Santanera, pues aseguraron que se hizo uso indebido de su nombre en Cumbia Machine.
No se puede contar la historia musical mexicana sin La Sonora Santanera, un grupo de músicos y cantantes que conquistaron al público con icónicas canciones como Perfume de gardenia, Amor de cabaret o Dónde estás Yolanda. Incluso, han pasado de generación en generación, pues sus temas continúan sonando fuerte en todas las celebraciones populares.
Lamentablemente, desde hace más de cuatro décadas existe un conflicto en torno al nombre de la agrupación. La Única, Internacional Sonora Santanera y La Sonora Santanera con María Fernanda pasaron mucho tiempo luchando por los derechos del nombre hasta que se dio a conocer una resolución legal.
De acuerdo con Gil Navarrete (director musical de La Sonora Santanera), su agrupación habría ganado los derechos del nombre, razón por la cual, cualquier otro concepto que use el mismo o uno parecido corre el riesgo de ser demandado por usarlo sin permiso.
“Ya se logró esta resolución que la verdad estábamos esperando y que yo creo que trae beneficios para todos. Los señores todo este tiempo han estado comentando muchas cosas hasta cierto punto, nosotros pensamos, de manera irresponsable”, declaró Navarrete en entrevista con De Primera Mano.
La versión del director musical fue respaldad por el representante legal de la agrupación, Miguel Merino, quien compartió más detalles sobre el veredicto: “Nos notificaron esta resolución en la cual confirman el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial que sus marcas son nulas y además les quita esa suspensión, quiere decir que ya esas marcas, según lo que la resolución estableces, ya no están vigentes“.
Por eso no fue todo, también mencionó que las sanciones van desde 500 mil pesos hasta los 4 millones de pesos mexicanos y no solo pueden levantarse en contra de quienes usen el nombre, también en contra de quienes contraten a esos conceptos musicales:
“Constituye a una infracción en materia de comercio, son sanciones bastante altas las que impone la autoridad tanto para la agrupación que cualquier nombre similar a La Sonora Santanera, como pudiera ser también cualquier empresario, productor o establecimiento que utilizara y anunciara que se va a prestar ahí La Sonora Santanera”, comentó el litigante.
Asimismo, mencionó que la familia Colorado (supuestos dueños del nombre) pueden solicitar al menos el 40 por ciento de los ingresos obtenidos con las presentaciones.
Bajo este contexto, Gil Navarrete fue cuestionado sobre una supuesta demanda que La Sonora Santanera con María Fernanda habría levantado en contra de Erik Rubín, Andrea Legarreta y Mía Rubín por trabajar con La Única e Internacional Sonora Santanera en Cumbia Machine, su concepto musical donde padre e hija colaboraron con Kalimba, Yahir, Lupillo Rivera, Edwin Luna, entre otros.
“Esto nos ha afectado lógicamente porque los señores han hecho un pésimo trabajo desde hace muchos años al utilizar la marca porque cobran la mitad de nosotros su show, nada que ver de que haya una inversión como todo artista de nivel requiere, los lugares donde se están presentando también han golpeado mucho a la marca”, explicó.
Asimismo, contó que en su momento La Sonora Santanera estableció comunicación con Claudio Yarto (Integrante de Caló) para que interviniera entre ellos y el exintegrante de Timbiriche y así lo hizo, pero la respuesta fue negativa.
“Me hizo una llamada este compañero del medio que está al frente de este proyecto (Erik Rubín) y yo le hice ver que la verdad no era nada personal en contra de él, incluso le dijimos: ‘Porqué no lo checas bien, debes entender que hay una situación que los señores traen de una manera muy irresponsable’ y aún así realizaron su evento y las consecuencias están ahorita”, declaró Gil Navarrete.
No solamente demandaron a él (Erik Rubín), también demandaron a su esposa (Andrea Legarreta) que es muy conocida, a su hija que también es muy conocida. No estamos autorizados a dar nombres, pero ellos saben a quién nos referimos y en cuanto estén las demandas, porque sí son demandas muy fuertes, son millonarias.